Justo este día, pero hace 30 años, a las 10:05 de la mañana comenzaron una serie de nueve explosiones en el sistema de alcantarillado del barrio de Analco, en la ciudad de Guadalajara, Jalisco.
El saldo oficial fue de 212 personas que perdieron la vida, 69 desaparecidos y mil 800 lesionados, además de la destrucción de más de 8 kilómetros de calles, afectaciones a mil 142 viviendas, 450 comercios, 100 centros escolares y 600 vehículos.
De acuerdo con estimaciones oficiales, los daños económicos llegaron a los 10 millones de dólares.
Las explosiones en Guadalajara
La primera explosión se registró en la esquina de la Calzada Independencia y Aldama. De acuerdo con testigos y sobrevivientes, se escuchó un estallido muy fuerte que sacudió el suelo y la calle estalló en mil pedazos Literalmente el concreto y las banquetas volaron por todos lados y quedó una zanja.
Las explosiones continuaron y pasada una hora casi 12 kilometros de calles del Sector Reforma habían estallado destruyendo todo a su paso.
Los vecinos de la zona ya habían denunciado meses atrás que de las alcantarillas salía un olor insoportable a gasolina. Medios locales afirman que las denuncias no fueron escuchadas hasta que un día antes de las explosiones, el Ayuntamiento vació pipas de agua dentro del sistema de drenaje y encontraron algo que no sorprendió: aquello era un río de gasolina. A pesar de eso, el presidente municipal de Guadalajara, Enrique Dau Flores, no consideró necesaria la evacuación.
La versión oficial de lo que pasó es que el poliducto Salamanca-Guadalajara derramó gasolina en la colonia Álamo Industrial y la gasolina llegó hasta el colector de aguas residuales. Eso llevó a la acumulación de vapores inflamables que no pudieron dispersarse, se provocó un sello hidráulico y la gasolina encontró un punto de ignición comenzando con las explosiones en serie.
Como en casi todos los desastres que ocurren en México, el reconocimiento se lo llevó la población. Llegaron personas de todos lados a buscar entre los escombros a los desaparecidos, a rescatar personas, a llevar comida, a ofrecer un techo donde dormir, a unirse ante la tragedia.
Sopitas
