Nadie sabe cómo es que el oso llegó al aeropuerto de Bristol, ni dónde estuvo durante los últimos noventa años, pero las autoridades locales llevan varios meses buscando a la persona que perdió un osito teddy hace casi más de un siglo.
A Bristol, como le pusieron cariñosamente las personas encargadas de su cuidado, le falta un ojo y su cuerpo está un poco desgastado, pero es el centro de atención de la policía encargada de la seguridad el aeropuerto pues éste fue encontrado en una bolsa junto a una tarjeta postal firmada en marzo de 1918.
La tarjeta cuenta con un mensaje en su parte trasera que podría dar pistas sobre el paradero del dueño legítimo de bristol, el osito que espera paciente, a ser encontrado una vez más.
“With dearest love and kisses to our darling Daddie from your loving little daughters Dora and Glyn.”
La mancillada fotografía que acompañaba a Bristol muestra a dos pequeñas niñas junto a un Bristol “más joven”. Se cree que la imagen era un regalo para despedir a algún padre que se preparaba para un largo viaje lejos de casa.
El oso ha sido razón suficiente para entretener a las autoridades del aeropuerto en lo que se concretan las investigaciones para retornar a Bristol al hogar de su dueño o sus familiares.
Ya desde una óptica más metalizada, un oso similar (acompañado de su foto) costaría unos 6,800 pesos; sin embargo, existe la posibilidad de que Bristol haya sido fabricado por Steiff, una prestigiosa compañía de animales afelpados de principios del siglo XX, lo que elevaría su precio considerablemente.
¿Ustedes qué harían? ¿Buscar al dueño o vender esta pieza histórica al mejor postor?
Mientras se investiga cómo demonios llegó Bristol a un aeropuerto (el día en que el oso se perdió no existía dicho lugar), podemos imaginar lo que pudo haber sucedido una vez que el oso afelpado se separó de los brazos de las niñitas de la foto.
http://www.sopitas.com/site/226321-encuentran-un-oso-de-peluche-perdido-hace-casi-cien-anos-en-aeropuerto-buscan-a-su-dueno/