(Fotos: STC Metro)

El boleto de Metro de la ciudad de México se resiste a desaparecer, a pesar de la modernidad de las tarjetas electrónicas.

Contrario a lo que vaticinó Francisco Bojórquez, ex Director del Sistema de Transporte Colectivo Metro, de que antes de 2013 el billete sólo sería “un recuerdo, ya que tarjetas recargables lo sustituirán en su totalidad”, el boleto sigue en uso.

Incluso se mantiene su función de medio conmemorativo de fechas especiales para el país o para la ciudad, como la reciente edición del 50 Aniversario del Centro Nacional de Cálculo del Instituto Polítécnico Nacional, emitido el 20 de mayo pasado.

(Fotos: STC Metro)

Transporte económico

El costo del boleto del Metro de la ciudad de México es uno de los más económicios en el mundo. Por poner un ejemplo, en la ciudad de París, Francia un viaje en el colectivo subterráneo cuesta un euro con setenta centavos, es decir, de 26 a 28 pesos mexicanos, en contraste con los tres pesos que cuesta en al DF.

En Nueva York, el viaje sencillo cuesta 2.25 dólares y para acceder es necesario tener una MetroCard.

En la capital mexicana desde 1969, ese papel de 5.5 de largo por 3 centímetros de ancho costaba un peso con 20 centavos. Hasta 1986 el Metro contaba con plantillas de 5 boletos, los cuales se diferenciaban de los unitarios por su color.

(Fotos: STC Metro)
De abril de 1968 a diciembre de 1995, el Sistema de Transporte Colectivo puso a la venta un abono de transporte, el cual era un boleto especial que permitía el acceso al servicio cuantas veces fuera necesario por el mismo costo.

Las filas para adquirir el abono eran interminables, pero valía la pena para los usuarios pues incluía a otros transportes públicos como los camiones Ruta 100.

El abono fue retirado, pues que no fue del todo rentable para el gobierno, y se regresó a las planillas, esta vez de 25 boletos cada una.

En 2006 con la venta de 12 mil tarjetas recargables, se pensaba que entonces sí desaparecería el boleto, sin embargo, siete años han pasado y auqnue las nuevas tarjetas permiten viajar también en Metrobús, se debe pagar el costo de cada viaje unitario, por lo que para muchos, el papel sigue siendo su mejor opción de viaje.