Para combatir las olas de calor y proteger a los estudiantes, la Dirección de Educación y Acción Cívica de Soledad de Graciano Sánchez está considerando la posibilidad de permitir ropa ligera y de algodón en lugar de los tradicionales uniformes escolares.
Juan Castro Castillo, titular de la dirección, explicó que el uso de ropa fresca y transpirable puede reducir significativamente el riesgo de golpes de calor entre los alumnos. “Sabemos que los uniformes pueden ser incómodos por sus múltiples capas. Queremos que los estudiantes puedan asistir a clases con ropa de algodón, ideal para estas condiciones”, indicó Castro Castillo.
Aunque los uniformes son un requisito en las escuelas, la flexibilidad en el código de vestimenta busca ofrecer a los estudiantes una mejor ventilación y evitar que el sudor se quede atrapado en la piel, disminuyendo así las probabilidades de sufrir golpes de calor.
“Prendas de manga corta y tejidos naturales como el algodón no generan más calor y ayudan a evitar la sensación de agobio durante las altas temperaturas. Estamos evaluando la posibilidad de que los alumnos puedan asistir con este tipo de ropa, especialmente para que se sientan más cómodos, junto con todas las estrategias que ha pautado el Gobierno del Estado”, agregó Castro Castillo.
Además del cambio en el vestuario, se han implementado medidas como trasladar clases al aire libre, como educación física, a las aulas, para evitar la exposición directa al sol y las inclemencias del tiempo.
José Juan Castro Castillo destacó que estas medidas no solo buscan garantizar el bienestar de los alumnos, sino también promover un ambiente escolar más saludable durante los días más calurosos.
