Tanto en la criminalidad como en los trabajos precarizados, existe una tendencia que considera los cuerpos de las jóvenes como objetos reemplazables, reveló el diagnóstico “Compás Joven: Las juventudes frente al trabajo digno en San Luis Potosí”.
El estudio elaborado por Solidaridad Internacional Kanda A.C. (SiKanda) y Educación y Ciudadanía A.C. (Educiac), informó que los espacios laborales continúan basándose en estereotipos de género para emplear a hombres o mujeres.
Reportó que quienes son cuidadoras, trabajadoras en el ámbito del hogar, o están en el trabajo reproductivo, enfrentan muchas presiones sociales y en el trabajo para conciliar sus jornadas no remuneradas con la remunerada.
Advirtió que las jornadas extenuantes de cuidados y trabajo doméstico, se acentúan en los períodos de confinamiento por la pandemia de la Covid-19, pero además producen otras enfermedades sobre los cuerpos de las mujeres en el corto y largo plazo, incluida la salud mental.
Dijo que, entre las preocupaciones de las potosinas jóvenes, se encuentra el hostigamiento, el acoso sexual; despidos y remoción de cargo por embarazo o cuidado de menores; y en las jefas de familia, en cuanto aumenta el número de hijos su salario en el trabajo disminuye.
Las entrevistas para la investigación, se aplicaron en las Regiones Huasteca, Media y Centro con trabajo en campo de octubre de 2020 a septiembre de 2021 con personas jóvenes de 15 a 29 años de edad.
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