La exposición a la radiación solar está asociada con el desarrollo de cáncer de piel. Un estudio de la Universidad de Northwestern, en Chicago, develó que la mayoría de personas no saben qué protector solar es más conveniente para su cuidarse de los rayos del sol.
Parte del problema fue la interpretación las etiquetas, develó el estudio, el cual contó con 114 participantes, y mostró que sólo el 49 por ciento de estas personas sabía el significado de las letras SPF (siglas en inglés para Factor de Protección Solar).
El SPF es el rango que protege a las personas de las quemaduras que provocan los rayos ultravioleta (UV) y ultravioleta B (UVB), estos se distinguen por la longitud de su onda, que entre más corta es más intensa y en última instancia puede desarrollar cáncer en la piel.
A partir del 2013, las etiquetas que protegen la piel de los rayos UV y UVB empezaron a contar con la categoría “broad spectrum” (o amplio espectro, en español).
El estudio mostró que las personas le dieron más importancia a la resistencia que tienen estas cremas al agua, con un 47.4 por ciento de prevalencia como factor de compra, que el amplio espectro que obtuvo 34.2 por ciento.
El doctor Roopal Kundu, asociado del departamento de dermatología de la Universidad de Northwestern, dijo a la revista de ciencia Live Science que si las personas quieren protegerse de los tipos de rayos ultravioleta deben empezar a verificar el amplio espectro, y no sólo el SPF.
Si bien la gente entiende que a mayor índice de SFP hay mayor protección solar, la investigación refirió que sólo el 29 por ciento de las evaluados tenían claro que la etiqueta del SFP no protege contra los rayos UVA, que pueden derivar en cáncer.
También en 2013, la industria de protectores solares se vio obligada a especificar en las etiquetas de los productos con un SPF menor a 15, o que no ofrecen amplio espectro, que ese producto protegía contra las quemaduras, pero no contra daños más serios.
Sobre la aplicación de protectores solares, la doctora Laura Juárez Navarrete, presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología, recomendó que se evite la exposición directa al sol entre las 10 de la mañana y las 16:00 horas.
“Hay que exponerse por ratos, con el protector solar aplicado media hora antes de esta exposición”. En caso de un viaje a la playa, la experta hizo hincapié en que el protector solar no se adhiere lo suficiente cuando se seca, por lo que hay que aplicarlo cada dos horas.
“Podría aplicarse hasta cada cuatro horas si no se están sumergiendo en el agua, eso depende de las características del protector, pero deben estar en el sol 15 minutos y ponerse bajo la sombra, bajo una palapa o una sombrilla otro tiempo y volver a exponerse al sol, esa es otra recomendación que hacemos”, dijo Juárez Navarrete.
Kundu, el especialista de la Universidad de Northwestern, afirmó que no siempre es posible que las personas se cubran la piel con ropa, pero es aconsejable que por lo menos se cubran áreas como el pecho y los hombros, que son las más sensibles. Incluso, en épocas en las que la gente suele pensar que hay menos sol como el invierno, los protectores solares deben ser aplicados.
Según, la Organización Mundial de la Salud (OMS), se detectan entre 2 y 3 millones de cánceres de piel no melanocíticos y más de 130 mil melanomas malignos, los más peligrosos, cada vez en una población más joven y resultado de comportamientos, en su mayoría, evitables.
“Entre más años vivas, más posibilidades tienes de tener uno por la acumulación de la radiación solar en nuestra piel. Es decir, si no nos cuidamos en la infancia, para los 18 años ya hemos recibido el 78 por ciento de la radiación que nos toca recibir aunque en la vida adulta ya no te quemes tanto, por eso es primordial cuidar a los niños”, agregó la doctora.
Entre los tipos de cáncer se encuentran el basocelular, espinocelular y el melanoma, y el común denominador entre los principales factores causantes es la luz ultravioleta, aunque también se incluye la herencia.
“Hemos visto los dermatólogos que antes diagnosticábamos a partir de más de 40 o 50 años, y que hoy los vemos tempranamente, a los 40 años, ¿qué quiere decir esto? que hemos incrementado la actividad bajo el sol, que los índices de radiación diarios son más fuertes y que esto está predisponiendo a tener este tipo de cáncer de piel”, dijo la doctora.
Fuente: Sin Embargo.