Por diferentes razones, la mayor parte de los acusados de corrupción le ganan a la autoridad en los tribunales.
Por lo menos en el 52 por ciento de los casos donde alguna dependencia federal inhabilita a algún funcionario por presuntos casos de corrupción, el particular que recibió la sanción gana los litigios en los tribunales, informó el presidente del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, Manuel Hallivis Pelayo.
Explicó que por lo general en casos donde el particular gana un litigio, prevalece el hecho de que la instancia que lo sancionó dejó un procedimiento que no estaba suficientemente documentado, o posiblemente no dio sustento legal necesario al proceso sancionador que llevó a la separación y en su caso inhabilitación del servidor público.
Dijo que no necesariamente ocurre que los procesos sancionadores estén mal hechos, sino que en ocasiones no tiene razón la autoridad, no está bien hecha la investigación o posiblemente el expediente quedó mal integrado.
No descartó que en algunos casos, donde los funcionarios inhabilitados ganan, la decisión se deba a que el funcionario que preparó el expediente no estaba preparado suficientemente para enfrentar el juicio o a que en ocasiones fueron valoradas mal las pruebas.
Dijo que por ahora y por lo que respecta al Sistema Nacional Anticorrupción, no hay ninguna instrucción bajada a las Salas Regionales, sino hasta que el Congreso de la Unión apruebe las leyes secundarias y reglamentarias de la reciente reforma constitucional.
Fuente: Pulso