Custodios del Centro de Reclusión de La Pila exigen reinstalación para cien de ellos y reprochan la recontratación de elementos que sí fueron dados de baja por diversas anomalías detectadas recientemente. Advirtieron que se plantarán en huelga de hambre si sus denuncias no son atendidas.
Margarito Jesús Sánchez Arriaga, custodio despedido, denunció que mientras algunos gozan de privilegios como el recontrato, algunos dejan más de veinte años de su vida en estos centros y son despedidos únicamente con tres meses de indemnización, “decididos por gente sin escrúpulos”.
Los custodios, que accedieron a dialogar con este medio, se quejaron de que les truncan el futuro y los dejan sin alternativas, mientras cien custodios de diferentes centros de reclusión o reinserción social batallan y apenas consiguen con quién dialogar.
Margarito Jesús dijo que la reforma de 2008 perjudica a los custodios, porque se da la injusticia de reinstalar a algunos mientras otros ni siquiera pueden acceder a una liquidación coherente con todos los años de juventud y madurez entregados a la vida de custodios dentro de los penales.
Los custodios se presentaron en el Palacio de Gobierno desde temprana hora y permanecieron esperando hasta que dialogaron con funcionarios de la Secretaría General de Gobierno.
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