El austriaco doble campeón olímpico de judo, Peter Seisenbacher, ha sido extraditado este jueves por las autoridades de Ucrania a Austria, donde afronta graves acusaciones de abuso de menores.
Seisenbacher, de 59 años, se encuentra ya en una cárcel de Viena y en las próximas hora un juez deberá decidir si le impone prisión preventiva, informa la radio pública austríaca.
El campeón olímpico y mundial se dio a la fuga en diciembre de 2016, poco antes de afrontar en Viena un juicio por las acusaciones de abuso sexual de dos chicas menores a las que entrenaba en Viena entre 1997 y 2004.
En la acusación se incluye el caso de una tercera menor que dijo haberse defendido de la agresión, por lo que la fiscalía ha calificado los hechos también como intento de abuso de autoridad.
El ex deportista fue arrestado en el verano de 2017 en su piso de Kiev tras estar ocho meses a la fuga, y desde entonces Austria había demandado su entrega en numerosas ocasiones.
Seisenbacher quedó en libertad tras su detención porque los hechos por los que se pedía su extradición habían prescrito en la legislación de Ucrania.
Austria siguió insistiendo en una extradición y un reciente cambio legal en Ucrania abrió esa posibilidad.
Ante esa situación el ex judoca trató de cruzar a Polonia con un pasaporte falso el pasado sábado, pero fue descubierto por la policía ucraniana y Kiev decidió entregarlo a Viena.
Seisenbacher, oro en Los Ángeles 1984 y Seúl 1988, ejerció distintos cargos en organismos deportivos austríacos tras retirarse de la competición.
Fue entrenador de la selección masculina de judo de Austria hasta que fue destituido en 1991.
Posteriormente ejerció de seleccionador de Georgia, hasta 2012, y después de Azerbaiyán.
ESPN
