Familiares y amigos de Ximena Olivares Lara y Humberto López González se manifestaron en la plaza de Tequisquiapan, Palacio de Gobierno y la Fiscalía General del Estado de San Luis Potosí, exigiendo justicia por una presunta negligencia médica que derivó en la muerte de su bebé. El caso involucra a cinco médicos de instituciones públicas y privadas, incluyendo el Hospital del Niño y la Mujer, el Hospital General de Zona No.1 del IMSS (conocido como el Hospital del Zapata) y un hospital privado.
Los manifestantes relataron una serie de irregularidades en la atención médica que comenzó desde el parto de Ximena Olivares en un hospital privado. Entre las acusaciones están la ausencia del médico tratante, la aplicación de una anestesia irregular, y el uso de la técnica Kristeller, que consiste en aplicar presión sobre el abdomen para acelerar el parto. Esta última es considerada por los padres como una posible causa del fallecimiento de su hijo.
Después de los complicados eventos, los padres acudieron al Hospital del Niño y la Mujer, donde se les negó atención debido a su afiliación al Seguro Social, siendo enviados al Hospital General de Zona No.1 del IMSS. Allí, aseguran que les exigieron 30 mil pesos para recibir al bebé, alegando que el niño había nacido en un hospital privado.
Finalmente, tras 11 días de supuesta negligencia y desatención médica, el bebé falleció debido a daño cerebral por falta de oxígeno. Los padres realizaron la marcha para visibilizar el caso y exigir que los médicos involucrados enfrenten consecuencias legales.
Los manifestantes también solicitaron al gobernador Ricardo Gallardo que se solidarice con su causa, pidiendo su apoyo para que se haga justicia y que no se repitan situaciones similares.