Al clasificar como reservada la bitácora de vuelo del helicóptero que trasladó a Ovidio Guzmán, alias El Ratón, líder de Los Chapitos, facción del Cártel de Sinaloa, al penal de máxima seguridad de El Altiplano, la Fiscalía General de la República (FGR) reconoció el nivel de violencia y “la evidente fortaleza” de las organizaciones criminales, pues aseguró que cuentan con fuerza, capacidad de armamento y de generar violencia, incluso con el apoyo de la población, lo que ha provocado la muerte de centenares de miles de servidores públicos y civiles.
EL UNIVERSAL requirió la versión pública de la bitácora del traslado por medio de una solicitud de información, pero la institución encabezada por el fiscal Alejandro Gertz Manero cerró la información al argumentar que su entrega representaría un “riesgo real, demostrable e identificable” y se podría poner en peligro la vida, salud y seguridad de los pilotos y sus familiares.
“El nivel de violencia y la evidente fortaleza de las organizaciones criminales es pública y notoria, ya que dichos delincuentes cuentan con fuerza y capacidad de armamento y violencia, incluso a veces con el apoyo de la población, lo que ha provocado la muerte de centenares de miles de servidores públicos y personas de la sociedad.
“Siendo todo ello la principal razón por la que no se les puede ni debe exponer públicamente en cualquier actividad en ejercicio de sus funciones ni en lo personal, ya que por la alta peligrosidad y la magnitud de deberes y obligaciones para con la sociedad y nación mexicana, esta información pone en riesgo la vida, la salud, así como la integridad y las funciones de la investigación que debe ser secreta”, señaló.
La tarde del 5 de enero, tras ser detenido en un operativo en Culiacán, Sinaloa, por el Ejército y la FGR, Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, fue trasladado de las instalaciones de la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos Organizada (FEMDO) al penal de El Altiplano, Estado de México, a bordo de un helicóptero de la FGR.
Esta reserva se suma a la que hizo la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de las bitácoras de todas las aeronaves que participaron en el operativo para detener a El Ratón y que El Gran Diario de México reveló el pasado 24 de febrero. De acuerdo con la Sedena, Guzmán López tenía a su cargo los laboratorios de producción de metanfetaminas, con áreas de operación en el norte y noroeste de la capital sinaloense.
En el oficio FGR/UTAG/DG/ 001626/2023 entregado a EL UNIVERSAL, la institución puntualizó que poner en peligro su trabajo, su vida y su integridad, sin que los servidores públicos puedan defenderse, va en detrimento no sólo de su vida, seguridad y salud, sino de la de sus familias y círculo cercano.
“Representa una flagrante violación a su derecho a la dignidad humana y a la autodeterminación, así como es una responsabilidad a cargo del Estado, el velar por su vida, seguridad, salud y trabajo, pues así ha sido determinado, inclusive por tribunales internacionales”, subrayó.
La FGR argumentó que al entregar esa información se podría identificar a los servidores que realizaron ese traslado, así como a sus familiares por internet y redes sociales, quienes “pueden ser amenazados o extorsionados”.
“La identificación de estas personas y sus actividades en cumplimento del servicio público que tiene encomendado, permite de igual forma identificar a sus familiares cercanos, mediante la búsqueda a través de instrumentos como internet, redes sociales, etcétera. Es dable identificar también a sus familiares y amistades, de donde se puede desprender información que permita conocer los lugares en los que pueden ser localizados o posibles motivos para ser amenazados”, dijo.
El Universal