Tras una ola de críticas por los altos costos de los boletos, la FIFA anunció un ajuste en los precios de algunas entradas para el Mundial 2026, permitiendo que ciertos aficionados puedan acceder a boletos con un costo de 60 dólares, incluso para partidos de alta demanda como la final.
El organismo rector del futbol informó que estas entradas estarán disponibles bajo la categoría llamada “grada básica” y aplicarán para los 104 partidos que se disputarán en Estados Unidos, México y Canadá. La medida busca atender el descontento generado entre los aficionados de distintas partes del mundo.
La FIFA explicó que serán las federaciones nacionales las encargadas de definir cómo se repartirán estos boletos, los cuales estarán destinados a seguidores considerados “más fieles”, es decir, personas que hayan asistido anteriormente a partidos de sus selecciones, ya sea como locales o visitantes.
La inconformidad surgió luego de que se dieran a conocer los planes iniciales de venta, donde no se contemplaban entradas de bajo costo para los equipos clasificados. En ese esquema, los precios más accesibles iban de los 120 a los 265 dólares, incluso en partidos de fase de grupos que no incluían a los países anfitriones.
Las críticas fueron especialmente fuertes en Europa, donde aficionados y organizaciones cuestionaron el modelo de precios de la FIFA, que incluye el uso de tarifas dinámicas y el manejo directo de su propia plataforma de reventa.
Ante este escenario, la FIFA defendió su decisión señalando que, como organización sin fines de lucro, los ingresos generados por la Copa del Mundo se reinvierten en el desarrollo del futbol masculino, femenino y juvenil en sus 211 federaciones afiliadas.