Francisco Garfias 04/06/2015 01:29
A la mitad de la comida con el personaje potosino surgió el nombre de Ricardo Gallardo Juárez. El tono grave que utilizó mezclaba preocupación, incredulidad, temor por lo que se asoma.
Gallardo es el candidato del PRD a la presidencia municipal de San Luis Potosí. Está bien posicionado en las encuestas. Es popular entre la gente más necesitada de la capital y de Soledad, municipio conurbado.
La bronca es que lo relacionan con el crimen organizado.
Tan es así que senadores del PRI en la Comisión Permanente agendaron un punto de acuerdo en la sesión de ayer en el que exhortan a la SEIDO a iniciar una investigación en contra de Gallardo Juárez por sus presuntos vínculos con Los Zetas.
El texto elaborado por el tricolor recuerda que el candidato del PRD a la alcaldía de San Luis Potosí gobernó el municipio conurbado de Soledad (300 mil habitantes) de 2009 a 2012.
Heredó el cargo a su hijo Ricardo Gallardo Carmona.
Este último fue detenido en enero pasado debido a sus supuestos vínculos con el grupo de delincuencia denominado Los Zetas. Actualmente, el hijo de Gallardo Juárez está en una prisión de alta seguridad en Hermosillo, Sonora.
El punto de acuerdo habla también del ataque armado que sufrió el candidato del PAN a la alcaldía de Soledad, Juan Carlos Velázquez Pérez, el pasado 26 de mayo.
Un comunicado del PAN acusó a policías de Soledad del ataque.
La víctima le dijo a Ciro Gómez Leyva que los Gallardo tienen en ese municipio “un cuerpo policiaco para intimidar, para levantar, para golpear, para inhibir”.
Ciro, por cierto, escribió una columna que no le gustó a Gallardo. La tituló “El Abarca de San Luis”.
El aspirante a edil de San Luis reaccionó en forma, por demás, virulenta.
“Qué bueno que no me encontré a ese mercenario de la noticia que es Ciro Gómez Leyva, si no, lo hubiera puesto parejo”, advirtió el candidato del amarillo, en un mitin celebrado en la Plaza de los Fundadores, según escribió el periodista en su columna de El Universal.
El abanderado del PRD tuvo suerte. El texto del PRI no llegó a tribuna. Los legisladores se atoraron en el prolongado debate sobre la suspensión indefinida de la evaluación para el ingreso y permanencia de docentes en la educación básica y media.
Se fue a la congeladora. El domingo son las elecciones. La próxima sesión de la Comisión Permanente es el miércoles próximo. Para ese entonces ya sabremos si Gallardo ganó la presidencia municipal de la capital potosina y si su familia o allegados retienen Soledad.
Si esto sucede, 40% de los registrados en el padrón del estado serían gobernados por los Gallardo y sus aliados.
- Buscamos a Carlos Navarrete para preguntarle sobre los supuestos riesgos que representa Gallardo. El presidente nacional del PRD avaló sin reservas su candidatura.
“Son temores infundados. Gallardo ha sido investigado por seguridad nacional. Por eso es candidato y sí puede ganar….”, nos dijo.
El optimismo de Navarrete es compartido por el expriista Fernando Pérez Espinosa , alias El Calolo, candidato del PRD a la gubernatura del estado.
Dice que Gallardo encabeza las preferencias electorales por seis puntos y que, junto con él, gobernará San Luis Potosí.
- Mal cálculo político el del gobierno federal al anunciar la suspensión indefinida del proceso de evaluación para el ingreso, promoción y permanencia de docentes en la educación básica y media.
Ante la opinión pública quedó como un gobierno timorato que cedió al chantaje de los violentos.
Si Luis Enrique Miranda, Emilio Chuayffet, Miguel Ángel Osorio o el presidente Peña suspendieron la evaluación para estabilizar el clima social en vísperas de elecciones, como algunos afirman, extraoficialmente, les falló la estrategia.
Los maestros de la CNTE andan más alborotados y violentos que nunca. Tomaron oficinas del INE en varias localidades del país, se robaron boletas, bloquearon carreteras, tomaron gasolineras, cercaron Tuxtla Gutiérrez, se robaron mercancía de camiones secuestrados.
Ayer ocuparon el aeropuerto de Oaxaca y amenazan con hacer lo mismo hoy en la Ciudad de México. No cejan en su determinación de “boicotear la farsa electoral”.
¿Qué negociaron? Preguntan en el Congreso, donde se multiplican las voces para solicitar la comparecencia de Chuayffet, Miranda y Osorio.
Las demandas del magisterio disidente crecen. Piden lo imposible para no desmovilizarse: quieren derogar la totalidad de la Reforma Educativa y la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Ya ni el PRI pudo zafarse del acuerdo de la Comisión Permanente, que exige se cumpla el proceso de evaluación de 300 mil profesores en las fechas difundidas por el Instituto de Nacional para la Evaluación de la Educación.
Todos los grupos parlamentarios firmaron.
http://panchogarfias.blogspot.com
Fuente: Excelsior
