Los niños fueron vistos por última vez cuando estaban bajo el cuidado de su padre durante el Día de Acción de Gracias.
John Skelton, un hombre originario de Michigan, fue acusado formalmente del asesinato de sus tres hijos, desaparecidos desde el Día de Acción de Gracias de 2010. De acuerdo con los registros judiciales del Condado de Lenawee, enfrenta tres cargos de homicidio y uno más por manipulación de pruebas.
Las víctimas, Andrew, de 9 años; Alexander, de 7; y Tanner, de 5, fueron vistas por última vez cuando se encontraban con su padre en el pequeño pueblo de Morenci, cerca de la frontera con Ohio. Los niños debían regresar al día siguiente con su madre, Tanya Zuvers, con quien Skelton se encontraba separado, pero nunca volvieron a casa.
Las autoridades presentaron los cargos pocos días antes de que el hombre, de 53 años, saliera de prisión tras cumplir una condena de 15 años por no entregar a los menores a su madre, delito por el que hasta ahora había sido sancionado.
A lo largo de más de una década, las investigaciones incluyeron búsquedas en bosques, ríos y diversas localidades de Michigan y Ohio, pero los pequeños nunca fueron encontrados. Según la policía, Skelton ofreció múltiples versiones falsas sobre su paradero, incluyendo historias sobre que los había entregado a otras personas “para protegerlos”.
El detective Jeremy Brewer, de la Policía Estatal de Michigan, aseguró durante una audiencia en marzo que no tiene “ninguna duda” de que el padre fue responsable de las muertes de sus hijos. La audiencia tenía como fin declarar legalmente fallecidos a los tres menores, pero Skelton se negó a participar.
“Lo que diga no va a cambiar nada”, expresó el acusado a través de una videollamada desde prisión.
Las autoridades continúan sin localizar los restos de los hermanos Skelton, pero con estos nuevos cargos, el caso podría finalmente llegar a una conclusión judicial después de casi 15 años de misterio.