Investigadores de la Universidad de Texas alertan que una especie de hormiga invasora de Suramérica tiene el potencial de cambiar el balance ecológico en el sureste de Estados Unidos, principalmente porque esas hormigas pueden acabar con las colonias del que es considerado como el insecto villano de la región: la hormiga de fuego, también conocida como hormiga colorada.
Las hormigas locas, oficialmente llamadas “hormigas locas leonadas” son animales omnívoros que pueden apoderarse de un área al matar o hacer morir de hambre a lo que estaba allí, dijo Ed LeBrun, investigador del programa de especies invasoras de Texas en el Laboratorio Brackenridge Field del Colegio de Ciencias Naturales.
“Quizá lo más relevante es el desplazamiento de la hormiga de fuego, que es el gorila en los ecosistemas de Texas por estos días”, dijo LeBrun en un comunicado de prensa. “Todo el sistema ha cambiado alrededor de las hormigas de fuego. Aquello que no puede tolerar a las hormigas de fuego, desaparece. Aquello que sí puede tolerarlas, ha florecido. Nuevas cosas han llegado. Ahora vamos a tener que revisar, sacar a las hormigas de fuego y poner algo en su lugar, algo que tiene una biología muy distinta. Va a haber muchos cambios con esto”.
Más allá de los problemas que causan para el medio ambiente, las hormigas locas pueden ser un gran dolor de cabeza para las personas porque sus poblaciones son muy densas, dijo LeBrun.
Las hormigas locas hacen nidos en paredes, espacios angostos, plantas caseras y contenedores vacíos en patios, dicen los investigadores.
“No pican como las hormigas de fuego, pero aparte de eso son una plaga mucho más grande”, dijo. “Hay videos en YouTube de personas sacando recogedores llenos de estas hormigas que estaban en el baño. Tienes que llamar a operadores de control de plagas cada tres o cuatro meses sólo para mantener la infestación bajo control. Es muy costoso”.
Las hormigas locas están enloqueciendo tanto, de hecho, que algunas personas quieren que regresen las hormigas de fuego, dijo LeBrun.
“Las hormigas de fuego son amables en muchas formas. Viven en tu patio. Forman montículos y se quedan allí, y sólo interactúan contigo si pisas su montículo”, dijo.
Los científicos desconocen qué tan lejos estas hormigas —originarias de Argentina y Brasil— podrían propagarse en Estados Unidos. Desde que fueron vistas por primera vez en Houston en 2002, han sido encontradas casi siempre en ambientes húmedos con vientos leves en partes de Texas, Florida, Luisiana y Misisipi.
Y aunque pueden poblar rápidamente un área pequeña, los miembros reproductores de la especie no vuelan, así que para moverse largas distancias deben trasladarse en tus cosas.
“Si las personas que viven o visitan las áreas invadidas son cuidadosos y revisan us cosas para detectar la presencia de hormigas locas cuando se movilizan o hacen viajes largos, podrían evitar que se propagaran”, dijo LeBrun.