La Iglesia católica de El Salvador suspendió de sus labores sacerdotales a un párroco de la Arquidiócesis de San Salvador, según informó este jueves el arzobispo José Luis Escobar.
“Tristemente ha sucedido un caso de abuso sexual de menores“, señaló Escobar en un breve video difundido en las redes sociales de un canal católico y sostuvo que se trata de Jesús Arazo, párroco de la iglesia de San Cristóbal.
Relató que Erazo declaró el pasado 15 de febrero ante el Tribunal Eclesiástico y de inmediato se procedió “a la suspensión a divinis del sacerdote, como una medida cautelar“.
“Se ha dado inicio al debido proceso canónico“, concluyó el jerarca católico salvadoreño, sin detallar si el caso es conocido o no por las autoridades judiciales del país.
En junio de 2019, la Iglesia católica de El Salvador creó una comisión especial para proteger a la infancia de abusos sexuales e investigar las denuncias contra sacerdotes involucrados en ellos.
“Al presentarse un caso, será ella (la comisión) la que atenderá a la víctima y juzgará si hay fundamento en el caso” para proceder a un proceso de destitución de los religiosos vinculados, dijo en su momento Escobar.
No es el primer caso de este tipo que se conoce públicamente, dado que en 2015 se conoció que cinco personas sufrieron abusos sexuales cuando eran menores de edad por un sacerdote.
Ese mismo año, se informó de la suspensión de Jesús Delgado, quien era reconocido como el biógrafo de San Óscar Romero.
En 2003, fue suspendido el sacerdote Luis Recinos, que ejercía en una iglesia del municipio de Apopa (norte) cuando el jefe de la iglesia salvadoreña era el español Fernando Saenz Lacalle.
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