Xochiquetzal Rangel
Al unísono con gritos que decían “Derechos Humanos, no represión”, vendedores ambulantes de giros tradicionales como elotes, libros, gelatinas y algodón de azúcar, intentaron reinstalarse en el callejón de Iturbide, ubicada en la plaza del Carmen, sin embargo su paso fue impedido por presuntos inspectores de la Unidad de Gestión del Centro Histórico, quienes no se identificaron oficialmente con gafetes o chalecos pero afirmaron pertenecer a tal área del Ayuntamiento.
Durante el intento de reinstalación por parte de los comerciantes desalojados del pasaje a Villerías, se contó con la presencia de al menos 30 elementos de la Policía Punicipal, los cuales formaron una barrera detrás de los ambulantes con el fin de contenerlos en caso de que avanzaran.
Los vendedores anunciaron que integrarán el frente “Salvador Nava” en memoria del ex presidente municipal y gobernador de San Luis Potosí, quien además fue abuelo del actual alcalde capitalino, Xavier Nava Palacios, debido a que consideran que el edil debería seguir la ideología de su abuelo y no reprimir a mujeres y vendedores de giros tradicionales que son el sustento de sus familias.
Una de las afectadas, Elizabeth López Navarro, justificó el intento de reinstalación en el pasaje a Villerías, argumentando que ayer tuvo una reunión con Nava Palacios en la Unidad Administrativa Municipal, quien “de viva voz económica me dijo que me pusiera a trabajar, que no había problema porque son giros tradicionales; después saqué el pliego petitorio y lo comenzó a firmar, me lo recibió”.
Respecto a la falta de permiso para vender en el pasaje Iturbide, la vendedora dijo que no se les ha permitido pagar el derecho de piso en el Ayuntamiento bajo el argumento de que no hay sistema o que no se encuentra la secretaria para ingresar el pago.
Expresó que otra de las peticiones es que tanto el alcalde capitalino como la directora de la Unidad de Gestión del Centro Histórico, Rocío Zavala, les presenten el plan de reordenamiento para saber en dónde podrían ser reubicados, y además reiteró que están dispuestos a ser uniformados y embellecer sus puestos conforme ellos lo pidan.
Por otra parte, llegó con micrófono en mano una comerciante ambulante que se dedica a la venta de libros, criticando la reciente firma que realizó el Ayuntamiento, a través de la Dirección de Cultura, con la Unesco, ya que, dijo, están coartando la cultura al negarle vender sus libros en el pasaje, además de que fue multada y le retiraron cerca de 35 libros.
Después de más de 20 minutos de diálogo con los inspectores no identificados de manera oficial y de emitir su comunicado a los medios de comunicación presentes, los comerciantes se retiraron de la plaza del Carmen con rumbo a la CEDH gritando consignas como “nos retiramos, pero mañana regresamos”, o “fuera Nava represor”.