El Congreso del Estado aprobó modificaciones al impuesto ambiental, entre ellas, posponer su entrada hasta el primero de julio. Con 21 votos a favor, tres abstenciones y ningún voto en contra, se aprobó el dictamen propuesto por los diputados del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido del Trabajo (PT).
Se enviará lo recaudado al Fondo Ambiental Público y al Fondo para el Cambio Climático. También se precisó la definición de emisión, con el fin de que se entienda como la descarga directa a la atmósfera de toda sustancia o energía, incluyendo, pero no limitándose, a olores, partículas, vapores, gases o cualquiera de sus combinaciones.
El dictamen establece el destino de los recursos recaudados y la delimitación de quiénes deberán pagar ese impuesto. Se considerarán las emisiones de bióxido de carbono, metano, óxido nitroso, carbón negro, clorofluorocarbonos, hidroclorofluorocarbonos, hidrofluorocarbonos y perfluorocarbonos para la aplicación del impuesto.
Quedan fuera de los sujetos obligados a pagar el impuesto aquellas empresas que realicen actividades relacionadas a las emisiones indirectas a la atmósfera de determinadas sustancias contaminantes, generadas en los procesos productivos que se desarrollen en el estado.