En el Centro Histórico, los propietarios de vehículos tienen que quitar las baterías a sus carros, porque siempre hay quien no se salvó de que se la roben. Explican que en los últimos días se han multiplicado los robos, y es hora de que ninguna autoridad interviene.
Conductores de automóviles de la zona afectada, explicaron que desde que arreciaron las condiciones de inseguridad en la zona centro, es muy fácil que un ladrón se lleve en unos cuantos segundos la batería de un carro.
Los afectados dicen sospechar de una red de complicidades en la que se encuentren los denominados lavacoches o “franeleros”, porque algunos dicen contar con testimonios de gente que pasa el “pitazo” cuando llega un vehículo a determinada zona.
“Los que estamos en el centro nos sentimos desprotegidos, porque ni para venir a divertirnos ni para vivir aquí, es posible moverse con libertad en el centro, confiando en la seguridad de los vehículos en la vía pública”, dijo Juan Manuel Herrera González, quien acude noche tras noche a visitar amigos que viven en departamentos en el centro.
Explicó que por ejemplo los ladrones quitan las baterías en algunas calles tales como Guerrero, Universidad, Morelos, Independencia y Agustín de Iturbide.
También reportan robos en las calles Díaz de León, Pedro Vallejo, Xicoténcatl, Comonfort, Ignacio López Rayón y Galeana.
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