Mientras el presidente de Ecuador, Rafael Correa, reclamaba en Bruselas a EU levantar las sanciones contra Venezuela, en representación del grupo latinoamericano, el bloque europeo apoyaba el …
La cumbre UE-Celac comenzó hoy en Bruselas con el alegato del presidente ecuatoriano Rafael Correa para que Estados Unidos levante las sanciones a Venezuela y el espaldarazo del bloque europeo al colombiano Juan Manuel Santos en el proceso de paz con las FARC.
“Rechazamos y demandamos la derogatoria de la orden ejecutiva emitida por el presidente Barack Obama”, dijo Correa en el discurso de apertura de la cumbre en nombre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), bloque del que ejerce la presidencia pro témpore. “La orden, además del ridículo argumento, viola flagrantemente el derecho internacional”, añadió.
En marzo, la Casa Blanca calificó la situación en Venezuela como una amenaza a la seguridad estadunidense e impuso sanciones a funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro. La Celac, la UNASUR, el G77 más China ya pidieron que se derogara este decreto.
Maduro no viajó a Bruselas para asistir a la cumbre. Jorge Arreaza, vicepresidente, es la máxima autoridad de Venezuela en el cónclave en el que participan unos 40 mandatarios de este bloque birregional de 61 países.
La situación política en Venezuela se convirtió en un tema de división entre ambos bloques durante la reunión que mantuvieron el martes los ministros de Relaciones Exteriores, reproduciendo lo que sucedió la semana pasada en la Asamblea Eurolat de legisladores de la UE y de la Celac.
A pedido de Venezuela, la Celac redactó un párrafo en la declaración final de condena y rechazo al decreto de Estados Unidos. Según indicaron fuentes con acceso a las negociaciones, ambas partes se habrían puesto de acuerdo en hacer una mención general que recuerde los principios del derecho internacional y la UE “sólo toma nota de la posición de la Celac” sobre Venezuela.
La UE ha expresado en varias oportunidades la “preocupación” por la situación política en Venezuela y la de algunos líderes opositores encarcelados. Por otra parte, en el discurso de apertura del bloque europeo, el presidente del Consejo, Donald Tusk, que representa a los 28 miembros de la UE, dio un espaldarazo al presidente colombiano, Juan Manuel Santos.
“Apoyaremos los esfuerzos del presidente Santos para que se logre una paz duradera en Colombia”, aseguró Tusk. La UE “pondrá en marcha un fondo para apoyar las acciones posconflicto en el país”, dijo en alusión a la promesa que el bloque europeo hizo a Santos cuando éste visitó Bruselas en noviembre, y que mantiene a pesar de que los combates con las FARC se hayan reanudado.
Santos pidió la creación de un fondo fiduciario para financiar los programas de reinserción postconflicto una vez alcanzada la paz. Tusk reafirmó además el compromiso europeo de “concluir las negociaciones sobre el diálogo político y el acuerdo de cooperación” con Cuba, a la vez que saludó la normalización de las relaciones entre la isla y Estados Unidos y pidió el fin del embargo.
En la declaración final, según indicaron fuentes, ambas regiones piden el fin del embargo de Estados Unidos a Cuba, una posición que mantienen sin cambios desde hace años.
Una fuente con acceso a las negociaciones precisó que se acordó una declaración política general sobre el clima pero que aún no había acuerdo sobre los objetivos detallados.
El cambio climático es un “tema fundamental. Perú va a plantear que sigamos avanzando en la consolidación del fondo verde”, dijo el presidente peruano Ollanta Humala al llegar a la cumbre. “Esperamos soluciones concretas”, agregó reafirmando el “compromiso incondicional” con la conferencia sobre el clima de París de fin de año.
El presidente francés, François Hollande, colocó el clima como “la prioridad de la diplomacia francesa” de cara a la conferencia de fin de año. El comercio también está en la agenda. La UE firmó acuerdos de asociación con importantes capítulos comerciales con 26 de los 33 países de la Celac.
Chile y México se encuentran con la UE en un proceso de “modernización” de sus acuerdos comerciales, con la incorporación de nuevos sectores como el de la energía para el país norteamericano. El viernes la UE y México celebrarán una cumbre para lanzar oficialmente la negociación.
Las estancadas negociaciones con el Mercosur también están en la agenda. El jueves, durante un receso de los jefes de delegación, entre los que habrá 42 jefes de Estado y de gobierno de las dos regiones, la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmstrom, se reunirá con los cancilleres de los países del Mercosur. Definirán allí los pasos a seguir.
Al llegar a la cumbre, la presidenta brasileña Dilma Rousseff afirmó que “el Mercosur pretende hacer su oferta y quiere saber si la UE está lista para eso”.
Fuente: Milenio.