“Es fundamental contar con un proceso jurídicamente vinculante que genere responsabilidades directas a quienes incurran en falta”.
Ante la importancia que supone la inspección de los recursos durante los procesos electorales, es fundamental contar con un proceso jurídicamente vinculante que genere responsabilidades directas a quienes incurran en falta, aseguró el titular de la Unidad de Fiscalización de los partidos en el IFE, Alfredo Cristalinas Kaulitz.
En entrevista, destacó la importancia de contar con una reforma político-electoral, donde se contemple la necesidad de que la fiscalización tenga efectos vinculantes antes de que se concluyan los procesos electorales y no quede únicamente en una sanción económica.
“Necesitamos una fiscalización que sea oportuna, con eficacia jurídica. Es decir, que tenga efectos vinculantes, porque de nada sirve una fiscalización que termina antes de la calificación, pero que no tiene un efecto vinculante. Si hay faltas, deben tener una responsabilidad antes de la elección”, explicó.
Cristalinas Kaulitz aseguró que las sanciones económicas o las amonestaciones públicas, que fundamentan el actual proceso de fiscalización, han demostrado ser insuficientes para inhibir las conductas violatorias del Código Electoral.
Por lo que ante las exigencias de la sociedad para tener una fiscalización anticipada y con efectos vinculantes en los actores, es necesario que se realice una revisión a la ley electoral, ya que aseguró que durante este proceso se ha demostrado que los tiempos pueden ser reducidos.
En este sentido, destacó tres ejes fundamentales en los que se debe establecer la reforma en la materia: La rendición de cuentas, la transparencia y el ejercicio de facultades, además de que se fortalezcan las facultades de comprobación con las que cuenta la unidad a través del acceso al secreto notarial y aseguramiento de cuentas bancarias.
“Tenemos un diagnóstico, luego de dos proceso electorales, que nos permite hacer un planteamiento para que el legislativo revise, porque nosotros no tenemos facultad de iniciativa para que revise estos tres grandes ejes. Todo ello, en su conjunto, no solo permite fortalecer la fiscalización, también todo el eje de rendición de cuentas y de transparencia”, consideró.
En consecuencia, agregó, la ciudadanía tendrá mejores y mayores oportunidades de decisión, al contar con más elementos que les permita dimensionar las infracciones en que incurren los partidos.
“Tenemos que trabajar en una cultura de cumplimiento, donde la sanción más importante sea la que impone el ciudadano en la urna, si determina no votar por alguien que no cumple la ley, porque tiene la posibilidad de conocerlo a través de la rendición de cuentas, de la transparencia y de la fiscalización”, dijo.
Sin embargo, aseguró que el proceso de fiscalización que se aplica en nuestro país si bien resulta “joven”, es considerado como uno de las más robustos y mejor dotados por el Internacional Foundation for Electoral Systems (IFES).
El titular de la unidad del IFE agregó que el procedimiento que se realiza en México tiene atribuciones más allá de la fiscalización, ya que contempla investigación, evaluaciones, verificaciones e incluso auditorias.
Detalló que las auditorias permiten a la autoridad allegarse de información que contribuye a la transparencia y rendición de cuentas a la ciudadanía, ya que estas se realizan no solo después de los procesos electorales, sino durante los 90 días de las campañas.
“Buscamos propiciar que con el tiempo, con la madurez que va adquiriendo la rendición de cuentas, la transparencia y la fiscalización, ya no haya necesidad de mandar verificadores como si fueran inspectores, y que los partidos políticos cumplan con sus obligaciones”, opinó.
En ese sentido, aseguró que los partidos han demostrado un gran avance en la profesionalización de rendición de cuentas.
Con información de: http://www.milenio.com/cdb/doc/noticias2011/edb9c93bd8928c14427dc1abc8c399be