La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha expresado su opinión sobre el consumo de mariguana, afirmando que “nadie debería ir a la cárcel por fumar hierba”. Estas declaraciones surgieron durante una reunión en la que se discutió el tema con el rapero Fat Joe y otras personas indultadas por condenas relacionadas con esta sustancia.
Harris señaló que muchas personas han sido encarceladas por simple posesión de mariguana, una situación que considera injusta. En este sentido, instó al Departamento de Salud y Servicios Humanos y al Departamento de Justicia a que agilicen la reclasificación de la mariguana como una droga menos peligrosa que otras como la heroína.
Actualmente, la mariguana se clasifica en la Lista I, junto con sustancias consideradas extremadamente peligrosas, lo cual Harris considera absurdo. El año pasado, el Departamento de Salud y Servicios Humanos recomendó reclasificar el cannabis a una categoría con un potencial moderado de causar adicción.
En Estados Unidos, casi 40 estados han legalizado el consumo de mariguana en diversas formas, aunque sigue siendo ilegal en otros estados y a nivel federal.
El proceso de legalización de la mariguana en Estados Unidos ha sido gradual y complejo, comenzando con programas de uso medicinal en la década de 1990 y culminando con la legalización del uso recreativo en algunos estados a partir de 2012. A pesar de la legalización a nivel estatal, la mariguana sigue siendo ilegal a nivel federal, lo que ha generado tensiones y desafíos legales en todo el país.
Sin embargo, el movimiento hacia la legalización continúa avanzando, respaldado por cambios en la opinión pública y la evidencia de los beneficios medicinales de la mariguana, así como la búsqueda de nuevas fuentes de ingresos fiscales.