El uso de la nómina legislativa para que diputados y aún funcionarios externos contrataran “aviadurías” para algunos favoritos, vía los pagos de honorarios, quedó expuesto en un audio en el que se escucha al diputado Pedro César Carrizales Becerra con una mujer, llamada Lizeth, quien se define a sí misma como “aviadora”.
En la conversación, que dura unos 11 minutos, García Miranda revela que el diputado de Morena, Edson Quintanar Sánchez, ex presidente y actual secretario de la Junta de Coordinación Política; el asesor legislativo Guillermo Balderas Reyes, el diputado priista Héctor Mauricio Ramírez Konishi, y el súper delegado del gobierno federal, Gabino Morales Mendoza, gestionaron puestos del Congreso para personas seleccionadas por los funcionarios.
La propia interlocutora de Carrizales Becerra se asume como una al señalar que “la mayoría de la gente estaba de aviadora, incluyéndome a mí. Soy licenciada”.
Achaca la situación a Balderas Reyes al cuestionar sus métodos. “¿Qué es eso de “vete a tu casa, estudia esto y me lo mandas”?”.
También señala que Edson Quintanar le prometió primero una beca y luego una plaza en el Congreso, que le dio como “regalo de cumpleaños”.
Además, le cuenta al diputado su tirante relación con alguien que identifica como Armando, un recomendado de Gabino Morales, al cual le sirve de informante de lo que sucede en el Congreso.
“Yo soy gente de Gabino. ¿No conoces a Gabo?”, cuenta que le señaló. También le cuestiona sobre su origen morenista: “¿De qué gente eres? ¿Eres de Paola? ¿Eres de Mijis? ¿De Marite? ¿De quién eres?”
De Armando, señala que gana 40 mil pesos mensuales y que no era puntual en sus labores.
Relata un episodio en el que la divulgación de una lista de aviadores generó pánico en Guillermo Balderas, al grado de pedirles que se fueran del Congreso porque “nos va como en feria si se dan cuenta que Edson metió a mucha gente”.
También señaló que dialogó con una de las dos personas cuya llegada atribuye al diputado priista Ramírez Konishi.
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