EL RADAR
El editorial de Antena
México ha estado enfrentando un abismo significativo y continuo con miles de personas desaparecidas. Mujeres y hombres, muchos muy jóvenes, son usados como carne de cañón por el crimen organizado que se ha metido hasta la médula de las estructuras de los 3 niveles de gobierno. Nadie los combate eficientemente y es relativamente fácil establecerse para “competir” por el mercado.
Hace apenas unos días trascendió la investigación basada en modelos matemáticos que se publicó en la revista Science por parte de Rafael Prieto Curiel, investigador postdoctoral del Complexity Science Hub de Viena en AUSTRIA, el resultado es devastador: los cárteles de la droga en México reclutan de 350 a 370 miembros a la semana, el crimen organizado es el reclutador más grande del país.
Las desapariciones de miles de personas en México han suscitado preocupación tanto a escala nacional como internacional. A continuación se exponen algunos de los aspectos clave de la situación y lo que han estado haciendo las distintas partes interesadas, incluido el gobierno y las organizaciones no gubernamentales (ONG):
Respuesta del gobierno:
El gobierno mexicano ha reconocido el problema y ha establecido diversos mecanismos para abordarlo.
Han creado unidades especializadas dentro de las agencias policiales para investigar y buscar personas desaparecidas.
En 2019, el Congreso mexicano aprobó una nueva ley sobre desapariciones para mejorar el marco legal para abordar este problema.
Participación de las ONG:
Numerosas ONG han desempeñado un papel crucial en la sensibilización sobre la cuestión de las personas desaparecidas y en la prestación de apoyo a las familias de los desaparecidos.
ONG como la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos y la Comisión Nacional de Búsqueda han participado activamente en la defensa de los derechos de las personas desaparecidas y en la realización de búsquedas.
Comisión Nacional de Búsqueda:
La Comisión Nacional de Búsqueda se creó para coordinar y centralizar los esfuerzos para localizar a las personas desaparecidas. Incluye representantes de organismos gubernamentales y de la sociedad civil.
Esfuerzos forenses:
Las organizaciones forenses han trabajado para identificar y dar un cierre a las familias de los desaparecidos a través de análisis de ADN y exámenes forenses de restos no identificados.
Atención internacional:
El problema ha atraído la atención internacional, y varias organizaciones y países han expresado su preocupación y han ofrecido su apoyo a México para abordar el problema.
Es importante señalar que, aunque se han realizado esfuerzos para abordar la cuestión, la situación sigue siendo compleja y difícil debido a la prevalencia de la delincuencia organizada y la corrupción. Las familias de los desaparecidos a menudo se enfrentan a obstáculos en su búsqueda de justicia, y muchos casos siguen sin resolverse.
Los gobiernos, de cualquier color azul, rojo, verde, guinda, amarillo o naranja de cualquier nivel no ha podido, o no ha querido reconocer la gravedad del tema, hace horas en San Luis Potosí se generó una reunión regional, de la zona bajío de los familiares buscadores, los desgranados corazones que subsisten a pesar de las promesas oficiales y el estigma que se hace cada vez más profundo.
