La nueva Ley Silla entró en vigor este 17 de junio con el objetivo de garantizar condiciones laborales más dignas en todo el país, al establecer que las personas trabajadoras deben tener acceso a sillas o asientos con respaldo durante sus jornadas, tanto en momentos de descanso como al realizar sus labores, siempre que la actividad lo permita.
En San Luis Potosí, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-Servytur), Fernando Díaz de León, reconoció la importancia de la reforma laboral y su impacto positivo en la salud, bienestar y productividad de los empleados.
“Estamos a favor de normativas que impulsen el trabajo digno y la productividad, pero también es cierto que sectores como restaurantes, comercio y atención al cliente deberán reorganizarse para cumplir con esta disposición”, afirmó el líder empresarial.
Aunque algunas empresas ya contemplan pausas y descansos en sus rutinas, otras —sobre todo micro y pequeños negocios— enfrentan retos logísticos, como la reconfiguración de espacios o ajustes en los procesos operativos.
¿En qué consiste la Ley Silla?
La reforma obliga a los empleadores a ofrecer sillas con respaldo a todos los trabajadores, sin importar su puesto o tareas, con el fin de prevenir daños musculoesqueléticos, circulatorios y ergonómicos causados por estar de pie durante largos periodos. Este tipo de esfuerzo físico es común en sectores como comercio, manufactura ligera, vigilancia y hostelería.
Las empresas tienen hasta el 14 de diciembre de 2025 (180 días naturales desde su publicación) para adecuar reglamentos internos y condiciones laborales. Además, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) deberá emitir lineamientos técnicos antes de julio de 2025 para regular su aplicación.
Díaz de León indicó que Canaco-Servytur ofrecerá acompañamiento y orientación a sus afiliados durante la implementación de esta reforma.
