La agencia de salud pública de la Unión Africana (UA) reportó el jueves que desde enero de 2024 se han registrado 42,438 casos de mpox (anteriormente conocida como viruela del mono), de los cuales 8,113 son confirmados, y ha habido 1,100 muertes en dieciocho países africanos.
Jean Kaseya, director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África (CDC de África), expresó en una conferencia de prensa que “no tenemos buenas noticias”. Reconoció que “la mpox no está bajo control” y lamentó que se hayan registrado las primeras 1,000 muertes en lo que va del año. Kaseya enfatizó la urgencia de “acelerar” las medidas contra la propagación de la enfermedad.
“Necesitamos ver acciones concretas en el terreno para frenar este brote. Dieciocho países afectados es demasiado. No podemos seguir así”, añadió el médico congoleño, haciendo un llamado a los socios internacionales para que liberen los fondos prometidos para la lucha contra la epidemia.
En la última semana, se notificaron 3,051 nuevos contagios y 50 muertes adicionales. Kaseya señaló que los casos confirmados han aumentado un 380% en comparación con todo 2023. La República Democrática del Congo (RDC) sigue siendo el país más afectado, concentrando el epicentro del brote.
Hasta el 16 de octubre, 20,897 personas han sido vacunadas en tres provincias de la RDC, incluyendo 8,435 mujeres. Los CDC de África declararon la mpox como una “emergencia de salud pública de seguridad continental” el 13 de agosto, lo que llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a emitir un estado de alerta sanitaria internacional.