Ciudad de México, 26 de julio (Afondoedomex/SinEmbargo).- El Poder del Consumidor denunció este día que el vehículo accidente del pasado viernes 20 de julio en la carretera México-Pachuca, donde perdieron la vida 13 personas y 5 resultaron lesionadas, se ocasionó en gran parte por el modelo Urvan de Nissan en que se transportaban, ya que los niveles de seguridad de este vehículo son mínimos.
En un comunicado, el Poder del Consumidor reveló que la venta del modelo Urvan de Nissan fue prohibida en países como Japón (país de origen de la marca Nissan) Estados Unidos, Canadá y Europa, debido a mínimos sistemas de seguridad.
Este modelo, junto con la Hiace de Toyota, son usualmente utilizados como transporte público interurbano, rural y como transporte escolar, incluso, explicó este comunicado, rebasando su capacidad máxima de 18 pasajeros.
Sin embargo, en nuestro país su distribución se da sin traba alguna, aunque “por su diseño, configuración y capacidad no son aptas estos servicios; por el contrario, ponen en peligro la vida de quienes la usan”.
Los principales responsables, señala este comunicado, son los gobiernos estatales y municipales: estos aseveran que son “transporte público seguro”, pero estos modelos “no son autorizados para ello”.
De acuerdo con este comunicado, el modelo de la camioneta Urvan que se vende en México es una versión sin frenos ABS (evitan que un auto derrape en caso de hacer un freno total inesperado). Por su parte, ninguna vehículo de la Hiace tiene este sistema.
Además, “ninguna de estas dos camionetas cuenta con cinturones de tres puntos en todas las plazas ni el Control Electrónico de Estabilidad (ESC)”, aunque, según este comunicado, deberían contra contar con ellos “por su capacidad y sus dimensiones”.
Este Control “permite mantener el control del vehículo en maniobras bruscas de emergencia y con ello evitar una colisión”, incluso, “puede salvar más vidas que el cinturón de seguridad”.
La organización recordó que, a principios de año, la entonces candidata a la presidencia de la república María de Jesús Patricio Martínez “Marichuy” y su comitiva de campaña, tuvieron un siniestro de tránsito en ese mismo modelo, con saldo de una persona muerta y varias personas lesionadas, incluida la propia ex candidata.
Hasta el día hoy “no existe una obligación a los fabricantes de autos en México que incluyan elementos básicos como los frenos ABS, o que aprueben estándares internacionales de impacto frontal o lateral, se espera que esto sea una realidad a finales de 2020 cuando la NOM-194 entre completamente en vigor”.
LAS VÍCTIMAS
Gloria de 68 años de edad, es una de las víctimas que resultó gravemente lesionada durante el accidente de transporte público en la Autopista México-Pachuca, quien sigue internada en un hospital de la Ciudad de México en espera de ser intervenida quirúrgicamente, sin que la empresa responsable dé la cara a los afectados.
Ese viernes, Gloria Marcela Morales Pavía, quien vive en la comunidad de San Pedro Xalostoc, tomó la unidad de la ruta “Transportes Ecatepec S. A de C.V”, marcada con el número económico 520, desde la Sección Jardines en Tecámac, debido a que desde un día antes se había quedado en casa de su hija.
Gloria, viuda desde hace dos años y madre de cuatro hijos, se dirigía a su trabajo a la Ciudad de México, sin saber la tragedia que iba atravesar y que la mantiene en la cama de un nosocomio, donde, denuncian, no ha recibido atención adecuada.
Aunado a esto precisó, que ninguna persona de la empresa de la ruta transportista responsable del accidente, se ha presentado a dar la cara a las víctimas y que su mamá está recibiendo atención debido a que es derechohabiente por contar con servicio médico de su trabajo, mientras los culpables se han mantenido al margen e intentan lavarse las manos.
Doña Gloria, viajaba en la unidad y fue una de las nueve personas que resultaron heridas, mientras que otras 13 fallecieron. Primero fue trasladada a la clínica 68 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde después de diagnosticarle una fractura en la cadera, fue llevada al hospital Magdalena de las Salinas.
Braulio, uno de sus hijos, explicó, que ese viernes no recibió atención médica adecuadamente y tuvo que esperar desde la una de la tarde hasta las ocho de la noche, para que les dieran cama, donde por atravesarse el fin de semana solo había médicos de guardia y solamente se le suministraron antibióticos para controlar el dolor, sin recibir un formal informe médico.
Angustiado y molesto comentó, que aún no le han realizado los estudios pertinentes para que su mamá sea valorada y saber cuando será intervenida quirúrgicamente.
Denunció que ninguna representante de la empresa de la ruta transportista se ha presentado ha dar la cara a las víctimas y que su mamá recibe atención debido a que es derechohabiente por su trabajo.
Por estos hechos, Braulio, exige a los involucrados en el accidente asumir las consecuencias de los daños que causaron y a la Secretaria de Movilidad del Estado de México la llamó a actuar para verificar que las unidades estén en buen estado y que los conductores del volante cuenten con las condiciones necesaria para brindar el servicio.
Con información de: Sin Embargo