En Alemania, a la cadena de comida rápida McDonald’s se le ocurrió sacar una versión picante de sus alimentos más famosos, y promocionarlos con una campaña basada en la cultura mexicana, o bueno, en lo que ellos creen que es la cultura mexicana.
Los anuncios, lejos de hacer que los mexicanos que viven por allá se sintieran orgullosos y añoraran a su país, causó su molestia, a tal grado de que varios compatriotas residentes en Alemania interpusieron una queja para protestar en contra de esta publicidad y calificarla como racista.
Hace unos días, este grupo de mexicanos mandaron una carta a la franquicia de McDonald’s Alemania.
“Parece denigrante y hasta cierto punto servimos de burla (…) Trabajamos para dar una imagen diferente como para que venga una empresa estadounidense y cambie la percepción que se tiene de los mexicanos en Alemania”, menciona la carta enviada a la empresa estadounidense.
Los inconformes también acudieron a la Embajada de México en el país teutón, pidiendo el apoyo de las autoridades mexicanas, quienes hasta el momento no han emitido ninguna declaración al respecto.
El video se titula “Los Wochos” e intenta hacer una parodia de la costumbre mexicana de consumir alimentos con picante. Así, un grupo de ciudadanos alemanes comienzan a “mexicanizarse” mientras se dirigen a un McDonald’s para satisfacer su peculiar antojo.
Con un español que apenas se entiende, banderas, trajes de charro (mezclados con elementos del viejo oeste gringo, hay que decirlo) y vestidos típicos, este comercial no les gustó nadita a los mexicanos en Alemania.
Quizá podríamos decir que estereotipa un poco la imagen de los mexicanos, pero de eso a tacharlo de racista hay una buena distancia. Seamos francos, hemos visto peores referencias a lo mexicano en otras campañas publicitarias, algunas de ellas hechas incluso en nuestro país.
Aceptamos que en muchas partes del mundo tienen una imagen así de México, pero lo mismo ocurre cuando hacemos referencia a los chinos, cubanos, peruanos, iraníes, argentinos o a los mismos alemanes, por poner sólo unos ejemplos. Solemos encasillar a veces sin mala intención ni darnos cuenta. Es labor de todos ir cambiando poco a poco esta costumbre.
Aquí el anuncio, para qué nos des tu veredicto…