La presidenta Claudia Sheinbaum dejó en claro que su gobierno no retomará la estrategia de guerra frontal contra el narcotráfico. En cambio, aseguró que se mantiene firme en su postura de no utilizar la violencia como método para enfrentar la inseguridad en el país.
Durante su conferencia de prensa en Palacio Nacional este martes 10 de junio, Sheinbaum expresó que su administración cree en el cumplimiento de la ley, el Estado de derecho y la cero impunidad, pero no en los métodos bélicos contra los grupos criminales. “Nosotros no creemos en la guerra contra el narco”, afirmó.
Al responder una pregunta directa sobre si regresaría a la política de “Abrazos, no balazos”, implementada durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, Sheinbaum señaló que sí se mantiene ese enfoque en el que se atienden las causas que originan la violencia, especialmente con apoyo a los jóvenes. “Sí, sí abrazamos a los jóvenes”, afirmó. Explicó que durante los gobiernos neoliberales se les dio la espalda, se les llamó “ninis”, y no se les ofreció una alternativa.
La mandataria resaltó que su estrategia de seguridad está basada en cuatro ejes fundamentales: atención a las causas, fortalecimiento de la Guardia Nacional, uso de inteligencia e investigación, y una coordinación constante entre las instituciones. Aseguró que este enfoque está funcionando, y que desde su llegada al cargo los homicidios dolosos han disminuido cerca de 26%.
Además, Sheinbaum rechazó que su gobierno aplique medidas de “mano dura”. Para ella, lo importante es trabajar con honestidad, usar la inteligencia para prevenir el crimen y garantizar resultados reales sin violar los derechos humanos. “No se trata de ejecuciones extrajudiciales, eso además de inmoral, no funciona”, dijo.
También explicó que las fuerzas del orden pueden usar la fuerza sólo de forma racional y en legítima defensa, cuando son atacadas. Dejó claro que no se permite el uso excesivo de la fuerza ni acciones fuera de la ley.
Para finalizar, dijo que el Gabinete de Seguridad tiene una exigencia clara: atender a la población, proteger a las personas y garantizar la paz. Todo esto, según Sheinbaum, sin caer en las prácticas de guerra que en el pasado sólo generaron más violencia.