El delantero portugués del Liverpool, Diogo Jota, fue despedido entre lágrimas, flores y homenajes tras su trágica muerte en un accidente automovilístico junto a su hermano André, también futbolista. Ambos perdieron la vida en una carretera del noroeste de España, cuando el vehículo en el que viajaban, un Lamborghini Huracán, se salió del camino y se incendió. Se sospecha que el accidente fue causado por el reventón de un neumático mientras intentaban adelantar a otro coche.
Jota, de 28 años, había contraído matrimonio apenas unos días antes del accidente, el 22 de junio, con su pareja de toda la vida y madre de sus tres hijos. Según reportes, la familia planeaba viajar desde Santander a Inglaterra en ferri, ya que el futbolista evitaba volar tras una reciente operación en el pulmón.
El último adiós se realizó en Gondomar, cerca de Oporto, donde Diogo creció y donde fundó una academia de futbol con su nombre. En la iglesia principal del municipio, el funeral fue encabezado por el obispo de Oporto y reunió a familiares, amigos, aficionados y figuras importantes del futbol como Bernardo Silva, Bruno Fernandes, Joao Félix y el técnico de la selección portuguesa, Roberto Martínez. También asistieron el primer ministro de Portugal, Luis Montenegro, y el presidente Marcelo Rebelo de Sousa.
La ceremonia fue especialmente emotiva por la presencia de compañeros del Liverpool. Virgil van Dijk y Andrew Robertson llevaron coronas de flores con el dorsal 20 del club. Un día antes, Van Dijk y otros integrantes del equipo, junto con el entrenador Arne Slot, acudieron a la capilla ardiente para acompañar a la familia del jugador.
Desde otros rincones del mundo también llegaron muestras de respeto. En Liverpool, decenas de seguidores dejaron flores, bufandas y mensajes en un libro de condolencias colocado cerca del estadio de Anfield. Además, se realizaron minutos de silencio en partidos de la Eurocopa femenina y del Mundial de Clubes.
Una de las escenas más conmovedoras ocurrió antes del partido entre Fluminense y Al Hilal, donde los jugadores Ruben Neves y Joao Cancelo no pudieron contener el llanto. Ambos decidieron abandonar el torneo en Estados Unidos para viajar a Portugal y asistir al funeral.
Incluso la música se unió al homenaje. En Gales, el grupo británico Oasis interrumpió su primer concierto tras 16 años de inactividad para dedicar a Jota su emblemática canción Live Forever.
Diogo José Teixeira da Silva, mejor conocido como Jota, fue recordado por su gente como una persona amable, sonriente y querida por todos. “Siempre tenía una sonrisa”, dijo su excompañero de clase Pedro Neves, conmovido frente al campo del Gondomar Sport Clube donde todo comenzó.
Como muestra de respeto, el Liverpool pospuso el inicio de los entrenamientos, previsto para ese mismo viernes, retrasándolo hasta el lunes. La noticia del fallecimiento del futbolista no solo estremeció al mundo del deporte, también tocó el corazón de miles de personas que lo admiraban dentro y fuera de la cancha.