Cambiar de cara parecería un tema de una película de ciencia ficción y/o acción. Sin embargo, no es nada alejado de la realidad para un británico a quien el cáncer le hizo perder la mitad de su rostro.
Después de varios años de tratamiento contra un tumor agresivo, Eric Moger, de 60 años, consiguió sobrevivir pero su apariencia original cambió radicalmente.
Tras ocho cirugías de reconstrucción poco exitosas Moger decidió contactar al doctor Christian Jessen, presentador del programa televisivo “Embarrassing bodies” (Cuerpos vergonzosos), en el que ayuda a personas con problemas relacionados con su aspecto físico, publicó el diario británico The Telegraph.
Fue gracias a la tecnología de impresión 3D que un grupo de cirujanos consiguieron diseñar una prótesis para la cara de Eric y llevar a cabo el primer procedimiento de este tipo en el Reino Unido.
Por medio de la impresión tridimensional, el cirujano experto en implantes dentales, Andrew Dawood, creó una cubierta de la parte derecha de la cara de Eric con la apariencia del rostro original.
Utilizando un procedimiento de naylon endurecido se moldeó una máscara de silicón que básicamente se empotró en el rostro del paciente con un éxito tal que, después de la cirugía, Eric pudo beber agua y saborear comida por la boca por primera vez en años.
Por su parte, Dawood espera que en un futuro próximo se logre imprimir en 3D y de manera directa estas máscaras, lo que aceleraría este tipo de procedimientos quirúrgicos.
“Podríamos producir diferentes tipos de prótesis, como por ejemplo, una con un bronceado para cuando uno se va de vacaciones, pero todavía no hemos llegado a ese punto”, dijo Dawood, quien ya piensa en variantes estéticas.
Por otra parte, los especialistas planean colocarle a Moger una nueva dentadura en un futuro para permitirle masticar. No obstante, para el paciente hay cuestiones más importantes como casarse e iniciar una nueva vida.
De acuerdo con The Telegraph, Eric le había propuesto matrimonio a su novia poco antes de que aparecieran los primeros síntomas del tumor que le quitó medio rostro. “Ahora tengo una nueva cara para la boda, puedo reiniciar mi vida después de cuatro años y medio”, dijo Moger.