En San Luis Potosí, el problema del suicidio se ha agravado con la pérdida de 282 vidas en los últimos años, según la maestra Vicky Brizuela, presidenta de la Asociación Cocoy & Feli para la prevención del suicidio.
Brizuela destacó que el suicidio afecta principalmente a jóvenes y hombres potosinos, representando el 80% de las muertes. En la población de 15 a 29 años, se ha convertido en la segunda causa principal de mortalidad.
Es crucial que la sociedad abandone la indiferencia hacia este tema y normalice las conversaciones sobre la salud mental en lugar de estigmatizarlas. Brizuela enfatizó que persiste el mito de que hablar sobre el suicidio puede incitar ideas suicidas entre los jóvenes, una percepción que debe ser superada.
Además, subrayó la importancia de prestar mayor atención a los hombres, quienes suelen reprimir sus emociones y no expresar señales de malestar emocional, lo cual puede llevarlos a tomar decisiones extremas como el suicidio.
La iniciativa busca generar conciencia y acción colectiva para enfrentar esta problemática desde una perspectiva comunitaria, reconociendo que la normalización de la salud mental es fundamental para salvar vidas y proteger el bienestar de todos los potosinos.
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