El Instituto Nacional de Migración (INM) informó que, en las dos primeras semanas de la presidencia de Donald Trump, más de 8,000 mexicanos han sido deportados desde Estados Unidos. Además, otras 2,500 personas de distintas nacionalidades también fueron repatriadas en este periodo.
Durante una conferencia en Tamaulipas, el comisionado del INM, Francisco Garduño, confirmó que desde el 20 de enero, cuando Trump asumió el cargo, se ha registrado un aumento en las deportaciones. El evento, realizado en un centro de atención a migrantes en Reynosa, destacó la importancia de ofrecer apoyo humanitario a quienes regresan al país.
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, señaló que las deportaciones se realizan bajo un protocolo conjunto con Estados Unidos para verificar si las personas repatriadas tienen antecedentes penales. Sin embargo, aseguró que la gran mayoría son ciudadanos trabajadores sin historial delictivo.
Las autoridades mexicanas reiteraron su compromiso de brindar atención digna y solidaria a los migrantes que regresan al país.
