La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, informó que más de 4 mil personas han sido deportadas desde Estados Unidos durante la primera semana del gobierno de Donald Trump. La mandataria explicó en su conferencia de prensa en Palacio Nacional que este número corresponde a un total de cuatro vuelos provenientes del país vecino, aterrizados en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. Sin embargo, aclaró que este volumen de deportaciones no representa un incremento significativo.
Durante la semana del 20 al 26 de enero, llegaron al país 4,094 deportados, en su mayoría mexicanos. La presidenta destacó que, a pesar de que la cifra se presenta de manera puntual en este periodo, en otras ocasiones se ha recibido un número similar de deportados, y no es un cambio alarmante.
En cuanto a la situación migratoria, Sheinbaum recordó que México tiene una larga historia de repatriación de migrantes, tanto durante el gobierno de Trump como en la administración actual de Biden. La mandataria resaltó que, desde hace años, el gobierno mexicano ha mantenido una coordinación estrecha con las autoridades migratorias de Estados Unidos, a través de reuniones periódicas entre ambos países.
Sheinbaum comentó que México se ha preparado adecuadamente para la llegada de deportados, con la implementación de centros de atención en la frontera norte. Algunos de estos centros ya están operativos, mientras que otros están en proceso de construcción. Estos lugares sirven como puntos de atención para recibir a los connacionales deportados.
En relación con el programa “México te abraza”, implementado para atender las medidas del gobierno de Estados Unidos bajo el esquema de “Quédate en México”, Sheinbaum explicó que en varios aeropuertos del país existen oficinas para ofrecer apoyo a los migrantes, como empleos y otros recursos para su reintegración.
Además, la presidenta aseguró que su gobierno está comprometido con la protección de los derechos humanos de los deportados. En caso de violaciones por parte de las autoridades migratorias, mencionó que existen protocolos a través de la Cancillería y el Instituto Nacional de Migración para atender las quejas. Incluso, en situaciones extremas, se pueden presentar denuncias ante tribunales estadounidenses.