Las autoridades sanitarias de México han emitido una alerta debido a la propagación de la fiebre Oropouche en diversos países de América Latina. Esta enfermedad, que puede afectar a personas de cualquier edad, a menudo se confunde con el dengue o el paludismo. La Secretaría de Salud exhorta a la población mexicana a tomar precauciones, especialmente aquellos que planean viajar a países de Sudamérica y el Caribe como Bolivia, Brasil, Colombia, Perú y Cuba.
¿Qué es la Fiebre Oropouche?
La fiebre Oropouche es una zoonosis causada por el virus Oropouche, transmitido a los humanos principalmente por la picadura del jején Culicoides paraensis (un tipo de mosquito). Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta enfermedad se propaga con mayor facilidad en América del Norte, América Central y el Caribe.
En los últimos diez años, numerosos brotes de fiebre Oropouche se han reportado en países de América Latina, especialmente en Brasil, Ecuador, Guyana Francesa, Panamá, Perú y Trinidad y Tobago. En febrero de 2024, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó sobre la alerta epidemiológica emitida por Brasil debido a casos detectados en el estado de Amazonas, con un total de 4,583 muestras reportadas, siendo el país con más casos hasta la fecha.
Síntomas de la Fiebre Oropouche
Los síntomas de la fiebre Oropouche, según la OMS, son similares a los del dengue y suelen incluir:
- Fiebre elevada de inicio súbito
- Dolor de cabeza
- Dolor muscular y articular
- Malestar general
- Vómitos
- Escalofríos
- Erupciones cutáneas
- Sangrado de encías o por las fosas nasales
- Afectación del sistema nervioso, ocasionando meningoencefalitis (inflamación del cerebro y la médula espinal)
El período de incubación de la enfermedad es de 4 a 8 días, y algunos casos pueden presentar signos y síntomas de meningitis aséptica.
Medidas de Precaución
La Secretaría de Salud recomienda a todos los mexicanos, especialmente a quienes planean viajar a los países afectados, extremar las precauciones para evitar la picadura de mosquitos y jejénes. Entre las medidas preventivas se incluyen el uso de repelentes, ropa de manga larga y mosquiteros, así como evitar áreas con alta densidad de insectos.
Ante cualquier síntoma sospechoso, se insta a la población a buscar atención médica inmediata para recibir el diagnóstico y tratamiento adecuado. La colaboración y prevención son esenciales para controlar la propagación de la fiebre Oropouche y proteger la salud pública.