EL RADAR
Por Jesús Aguilar
@jesusaguilarslp
México tendrá su primera Presidenta, el 99% de los momios así lo indican; las dos opciones actuales son patrocinadas, impulsadas o impuestas por sendos machos territoriales cuyo patriarcado disfrazan con el “cambio de género” que dizque enarbolan.
Pero “haiga sido como haiga sido”, mujeres con consciencia detentarán el poder como nunca antes y al márgen de sus misóginas catapultas (AMLO o Marko-Alito-Chucho) tendrán la sensibilidad de avanzar en una agenda que han reprimido sistemáticamente. Claudia Sheinbaum ya hizo un esbozo de cómo podría atender este tema con la seriedad que amerita.
La fuerza de las mujeres hoy rebasa inclusive el poder del estado, son la mitad real más uno del país, y la mayoría están rebosando de rabia y una energía creadora que nadie puede aún medir. Y que es incontestable.
En febrero de 2021 el Presidente López Obrador declaró, ““Ahora, con la simulación del feminismo, empiezo a escuchar «rompe el pacto, rompe el pacto, rompe el pacto» y me enteré lo que era eso hace cinco días porque mi esposa me dijo «rompe el pacto patriarcal, o sea. deja de estar apoyando a los hombres». Ahí cuando se habla de rompe el pacto, ya estoy rompiendo el llamado Pacto por México, que fue pacto contra México, o el pacto de silencio que establecieron los que desaparecieron a los jóvenes de Ayotzinapa, pero el otro pacto no. Son expresiones importadas, copias. ¿Qué tenemos nosotros que ver con eso, si somos respetuosos de las mujeres y todos los seres humanos? Pero también en eso se monta el conservadurismo”.
A casi 3 años de estas declaraciones, la “verdad histórica” de Ayotzinapa tuvo un nuevo capítulo cuando el Gobierno Federal optó por esconder bajo la alfombra las responsabilidades del ejército, con quien cogobierna, y en ningún apartado del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) de este gobierno se destinaron mayores recursos para la agenda de género que beneficie a las mujeres.
Hoy ocurren 12 casos de feminicidio al día y 4 mil 550 han ocurrido en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La realidad es dura pero ejemplifica a pedir de boca lo que esgrimimos.
En San Luis Potosí las pocas figuras de la 4T, Gabino Morales como cabeza visible, no han tenido tanta repercusión mediática como uno de los opinadores recurrentes de la vida pública potosina, Leonel Serrato, otro de los entenados del viejo Navismo acomodado ahora en la “izquierda transformadora color vino tinto” y cobijado por los millones de pesos que le ha “tocado” dispersar en la zona metropolitana capitalina.
Leonel Serrato ha demostrado una serie de actitudes públicas y privadas violentas contra las mujeres o contra quien sea que interpele los alcances de su “gran poder”, ha insultado, desafiado, denostado, atacado, embestido o incluso agredido a diputadas, magistradas, reporteras, al Rector de la Universidad, al Gobernador (con quien trabajó y salió corrido), seguramente necesitado de reflectores que maquillen sus más profundas inseguridades y carencias.
Todo lo hemos consignado con objetividad, sus respuestas siempre han sido parcas o nulas, porque además, una de sus condiciones nunca ha sido la humildad.
En buena medida su ensoberbecimiento se debe a la protección que le ha brindado Gabino, su amigo y compinche, a quien ha montado como dócil corcél para sus perversos y unipersonales objetivos, la explicación es simple, Serrato le ofrece panoramas y agudezas políticas locales y nacionales a las que el ex brigadista no tenía acceso a cambio de una suerte de impunidad cuatroteísta sin ambages.
Gabino ha sido ya advertido de la conducta constante de Serrato Sánchez y sabe incluso del peligro de mantenerlo a raja tabla como potencial candidato a cualquier cosa cuando tiene una sentencia por violencia política de género, Morales Mendoza insiste en que es solo “una campaña negra”; al menos hasta ahora.
Leonel ya manifestó su arrogante intención de contender por la alcaldía de la capital a pesar de sendas derrotas en su camino previo, hoy está publicado por el Diario Oficial de la Federación e impulsado desde las bancadas morenistas en San Lázaro y Reforma la llamada LEY 3 DE 3 contra DEUDORES ALIMENTICIOS Y AGRESORES. Leonel es uno de los más destacados casos recurrentes de este último apartado con una sentencia previa como responsable de violencia política de género.
Hoy hay nuevas víctimas dentro del clóset de “fantasmas mancillados” por Serrato, pero contrario a lo que todos podían pensar son dos elementos clave de su propio “equipo”, y no brigadistas adoctrinados o burócratas a su servicio, son el flamante Delegado del Bienestar en San Luis Guillermo Morales y, contra todo pronóstico la más poderosa integrante de la 4T potosina de facto, la dirigente en pausa y hermana de la potente e influyente Secretaria Federal de Seguridad. Rita Ozalia Rodríguez, fórmula para el Senado, responsable formal de la estructura Morenista potosina y cercanísima hermana a una de las pilares del gobierno de AMLO Rosa Icela Rodríguez, recien sufrió, al igual que el joven Morales López nuevos y tremendos agravios públicos, “regaños”, desplantes y groserías inimaginables por el desafortanadamente protegido por Gabino Morales.
El raciocinio político de Gabino, que ha construido MORENA en San Luis desde sus cimientos está tocado por la nobleza de sus intenciones, y por la manipuladora careta con la que Leonel asume lo gobierna, hoy mismo hay un evento en el que Rita y Gabino compartirán atril con el notario en pausa, Serrato tendrá que volver a fingir que no pasa nada o remediar lo que ya parece a todas luces irreparable.
El famoso coeficiente de competitividad en su caso es claro, puede ser el más conocido y reconocido, pero sus negativos son altísimos, una larga vida de traiciones y agravios lo respaldan, ¡cómo no!.