La Haya – El holandés Loek van Mil, que fue el pelotero más alto del mundo y jugó en grandes ligas, falleció de forma repentina a los 34 años.
La federación holandesa de béisbol informó este lunes de su muerte debido a un “accidente fatal”, aunque no dio más detalles a petición de la familia.
El jugador sufrió un fuerte golpe en la cabeza el pasado diciembre mientras hacía senderismo en Australia, donde jugaba para Los Bandidos de Brisbane, y estuvo casi 24 horas inconsciente antes de ser encontrado y hospitalizado.
A pesar de sobrevivir, no fue capaz de recuperarse para volver a jugar y anunció su retirada del béisbol profesional la semana pasada.
El lanzador, que destacaba por ser el más alto del mundo con 7 pies y una pulgada (2.16 metros), jugó entre 2005 y 2015 en varios clubes de las grandes ligas de Estados Unidos, entre ellos Minnesota Twins y Los Angeles Angels.
Disputó 48 partidos como internacional de la selección holandesa, con la que ganó el Campeonato de Europa en 2016 y llegó a semifinales del IV Clásico Mundial de Béisbol.
La federación le agradeció a van Mil su dedicación por el béisbol y les deseó a los familiares “fuerza para que puedan hacer frente a esta gran pérdida”.
ESPN