La muerte de Perla Patricia Morales, una mujer de 38 años originaria de Allende, Nuevo León, causó consternación en la comunidad luego de que fuera atacada por una araña viuda negra. El caso generó dudas debido a las distintas versiones sobre la disponibilidad del antídoto en la clínica donde fue atendida por primera vez.
El incidente ocurrió el 15 de noviembre de 2025 en la comunidad de Los Sabinos, donde la mujer se encontraba en su casa cuando sintió los primeros síntomas de la mordedura. Tras pedir ayuda, fue llevada a la Unidad de Medicina Familiar No. 16 del IMSS en Allende, ingresando con un cuadro grave de shock anafiláctico.
En esta primera atención, el personal médico aplicó los protocolos de urgencia para estabilizarla. Aunque algunos medios locales aseguraron que la clínica no tenía el antídoto, el IMSS aclaró después que sí cuentan con el suero para este tipo de casos y que lo más urgente era atender la reacción alérgica severa que presentaba la paciente.
Debido al rápido deterioro de su estado de salud, fue trasladada al Hospital General de Subzona 11 del IMSS en Montemorelos. Ahí fue intubada y se le aplicó nuevamente el antídoto contra el veneno de la araña. A pesar de los esfuerzos médicos y las maniobras de reanimación, Perla sufrió un paro cardiorrespiratorio alrededor de las 21:30 horas y perdió la vida.
La mordedura de la Latrodectus mactans, conocida como viuda negra, puede causar dolor intenso, dificultad respiratoria, rigidez muscular e incluso fallas cardíacas. Autoridades y especialistas recuerdan que esta especie suele esconderse en zonas oscuras, grietas y espacios poco transitados, especialmente en viviendas de zonas rurales o semirrurales, lo que aumenta el riesgo de contacto.