El exmandatario estadounidense Donald Trump aseguró este viernes que si es condenado en alguno de los casos judiciales que enfrenta, no dará por terminada su campaña electoral para las presidenciales de 2024.
“No hay nada en la Constitución que lo diga”, indicó en el programa de radio The John Fredericks Show.
Trump se pronunció un día después de que el fiscal especial Jack Smith presentó dos nuevos cargos contra él de obstrucción a la Justicia y otro de retención intencionada de información clasificada en el caso de los documentos hallados en su mansión de Mar-a-Lago, por el que ya fue imputado en mayo.
Los nuevos cargos están relacionados con presuntos intentos de eliminar imágenes de videovigilancia en esa residencia en el verano de 2022, pero Trump señaló este viernes que entregó lo que le pidieron: “Tienen mis cintas”.
La jueza Aileen Cannon estableció la semana pasada que el juicio por el manejo de esos documentos clasificados se inicie en mayo de 2024, cuando faltarán poco más de seis meses para las presidenciales estadounidenses.
Preguntado sobre si finalizaría su campaña electoral en caso de ser declarado culpable y condenado, el expresidente republicano fue rotundo: “Para nada”.
Las acusaciones de la Justicia de EU contra Trump
Trump se enfrenta además a una probable nueva imputación por su rol en el asalto de miles de sus seguidores al Capitolio del país el 6 de enero de 2021, que tuvo lugar mientras se ratificaba la victoria del demócrata Joe Biden en los comicios de noviembre de 2020.
Trump reiteró su alegato de que se trata de una persecución política contra él por parte de la “izquierda radical”.
“Están usando al Departamento de Justicia y al FBI para ir por candidatos. Es una táctica bastante habitual en el tercer mundo y ahora este país la está utilizando por primera vez”, reclamó.
En su opinión, se está intentando “intimidar” a la gente para que “diga mentiras” sobre él.
Trump es el primer expresidente de la historia de Estados Unidos que ha sido imputado. Además del caso de Mar-a-Lago, un gran jurado lo imputó en Nueva York en marzo pasado por el presunto pago ilegal a la actriz porno Stormy Daniels durante la campaña electoral de 2016 a cambio de su silencio sobre el “affaire” que mantuvieron diez años antes.
El expresidente dijo que intenta proteger a su familia de estas causas judiciales.
“Siempre es desagradable cuando tienes que decirles: ‘Por cierto, mañana en algún momento voy a ser imputado’. Y que ella (en referencia a su mujer, Melania Trump) te pregunte por qué y tú digas ‘No tengo ni idea’”.
El Financiero