Nos vemos en las urnas

AUTONOMUS ALUMNI, OPINIÓN

Viernes 31 de mayo, nos encontramos a 48 horas del inicio de la jornada electoral que marcará el rumbo del país los próximos seis años. En las comidas familiares, redes sociales, medios de comunicación, escuelas y hasta misa solo se habla de una cosa, el tema de conversación, participar y votar este 2 de junio. Pero ¿por qué genera tanta incertidumbre y curiosidad estas elecciones?

En un primer punto desde el cierre de campañas me he percatado de un discurso que intenta polarizar por parte de la oposición, llamando al voto útil, que Amor y Corazón por México es la solución al problema que se avecina y solo Xóchitl y compañía nos pueden salvar.

Por otro lado, Morena y su candidata respetando el fin de las campañas, el partido poniendo de foto de perfil en sus redes una imagen con la siguiente leyenda “ESTA PÁGINA PERMANECERÁ INACTIVA HASTA LA CONCLUSIÓN DE LA JORNADA ELECTORAL” y Claudia Sheinbaum discreta y cautelosa, lo cual me parece normal tomando en cuenta que ya lleva casi un año en campaña.

Y finalmente, Maynez y MC jugando su papel, el primero subiendo publicaciones y contenido en sus redes diario para mantener la interacción con el público como ha sido desde qué Movimiento Ciudadano se convirtió en la cantera de influencerspor excelencia del país y al mismo tiempo, MC jugando su partido y llamando a los votantes a acudir “fosfo fosfo” a las urnas este próximo domingo.

¿Cuál es la lectura de todo esto? La suerte ya está echada, lo que ocurra el 2 de junio es el resultado de los actos circenses que nos han acompañado a lo largo de esta primera mitad del 2024, cada campaña y presentación pública peor que la anterior, debates insípidos y deplorables y un mensaje tergiversado y polarizante, corrupción,asesinatos, chapulineadas y lo peor de todo los discursos patéticos de intentos de mesías.

Mi reflexión es la siguiente: La presidenta ganó las elecciones desde 2023, desde ese entonces hasta hoy en día solo ha sido un trámite y una gira artística para presentarse ante el resto de los mexicanos que no habitan en el sur del país. La coalición tiene que dejar de dar pena y parar su invitación al voto de castigo tomando en cuenta que ellos han ostentado el poder los más de 70 años del PRI, 12 del PAN y nuevamente 6 del PRI, entiendo su temor de perder el hueso por el que han comido y llenado sus cuentas de banco por generaciones, pero no se preocupen, se sabe que perfectamente que los que hoy están atacando a MORENA es cuestión de tiempo para que chapulineen también y sigan moviéndose hacia dónde sopla el aire.

¿Qué nos queda a nosotros? No dejarnos de engañar con el discurso de “vota todo por mi partido para salvar al país” los ejercicios democráticos requieren pesos y contrapesos, lean las propuestas, sepan el proyecto de nación que tienen los candidatos, ver sus redes sociales o los debates es insuficiente ya que nos han demostrado a pulso que ellos solo quieren hacer cosas para llamar la atención en esos medios, no buscar el transmitir el proyecto que se quiere construir. Si se quiere construir una democracia funcional tiene que haber paridad y pluralidad en el congreso, no permitir que sean 50% y 50% o todos del mismo color, tiene que haber debate y discusión objetiva sobre las decisiones del país y los extremos nunca son buenos.

Voten por el partido y candidata o candidato de su preferencia, el que concuerde con sus ideales, el que les caiga mejor, el que tenga buen proyecto, cualquier elección contribuirá a fortalecer nuestra democracia mientras participemos, no el votar específicamente por alguien.

Alan Imanol García Méndez 

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