“La verdad nuestro campo está totalmente tronado”, señaló el presidente municipal de San Vicente Tancuayalab, Jesús Soni Bulos, quien añadió que cerca de la mitad de la población de esta localidad se ha visto afectada por los estragos de la sequía. No obstante, aceptó también no tener un diagnóstico específico en pesos y centavos de cuánto es lo que se requiere para paliar esta situación.
Dijo que afortunadamente San Vicente Tancuayalab fue incluido entre los municipios en situación de desastre por la sequía, sin embargo, en próximos días se llevarán a cabo las reuniones con las autoridades estatales para definir con cuántos recursos y e insumos apoyará la Federación a la entidad potosina.
El alcalde añadió que “yo he visto que el gobierno federal le ha dado prioridad a hacer reformas y más reformas, pero nosotros queremos que en nuestro municipio se aplique una estrategia similar a la que se hizo en el estado de México, para meterle dinero al campo, es urgente porque en estos momentos todo lo que son granos, pues tienen que ser importados”.
Detalló que para activar el campo potosino y no sólo el de San Vicente Tancuayalab se necesitan inversiones de muchos millones, sin embargo, señaló que por lo menos en las reuniones que se han tenido junto con la Secretaría de Desarrollo Social y Regional, se ha hecho la propuesta de agrupar ejidatarios, para que las tierras puedan ser tecnificadas con programas específicos.
Finalmente Soni Bulos comentó que la otra “esperanza” que se tiene es el caso de que se pueda concretar el proyecto de la presa y el sistema hídrico Pujal-Coy. Precisó que la presa sería de alrededor de seis mil hectáreas, lo que garantizaría la producción agrícola de la región, con miras a que la zona integrada por San Vicente, Tamuín y Ébano se convierta en el centro granero del estado.
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