¿A quién no le encantan las bodas? Te sirven la cena, hay mucho alcohol y una pista para bailar, te regalan recuerditos y te tomas muchas fotos porque esa noche si te bañaste y perfumaste.
Parece que a los argentinos les encantan las bodas y como cada vez es menos la gente joven que se casa, decidieron empezar a hacer ‘bodas falsas’ para variarle a los antros y los bares.
Todo empezó cuando un grupo de amigos se dio cuenta de que probablemente nunca fueran a una boda todos juntos a menos que fuera la de alguno de ellos, pero eso se veía demasiado lejano. Entonces decidieron organizar ellos mismos una boda actuada y vender entradas.
La loca idea resultó ser un éxito, se vendieron todas entradas rapidísimo y así continuaron haciendo más ‘bodas’. Todo es exactamente como en una boda: hay una novia, un novio, ceremonia civil, lanzan el ramo… Todo es real excepto la boda en sí, que es actuada y donde todo puede pasar.
Antes de cada boda, se planea toda una telenovela, hay una historia detrás de los novios; cómo se conocieron, quiénes son y demás. En una de las bodas, el novio confesó en el altar que estaba enamorado de su pedicurista y al final temrminó siendo una boda entre dos hombres.
¿Ustedes pagarían por ir a una boda falsa con sus cuates?
Con información de: BBC
