Rusia continuará desarrollando equipamiento militar para fuerzas terrestres que probablemente se desplegarían en el sur del país, en la península de Crimea o en las regiones de Rostov y Krasnodar.
Según ha comentado al periódico ‘Nezavísimaya Gazeta’ una fuente en el Ministerio de Defensa, la base de estos grupos los formarán unidades y asociaciones blindadas. En el ministerio no descartan la posibilidad de que en los próximos dos o tres años en estas regiones se forme un nuevo Ejército de tanques equipado con las últimas máquinas de la plataforma Armata.
Este crecimiento de la infraestructura militar puede estar relacionado con el agravamiento de la situación en Ucrania y con los planes de la OTAN de aumentar la presencia en las fronteras con Rusia de formaciones blindadas, entre otras.
Cabe recordar que hace dos meses el secretario de Defensa estadounidense, Ashton Carter, anunció que EE.UU. envió a Europa del Este y los países bálticos 250 tanques junto conotros equipos y suministros militares. En total, a finales de 2015, según el embajador estadounidense ante la OTAN, Vierta Douglas, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania y Bulgaria contarán con más de 1.000 unidades de vehículos blindados de diferentes tipos.
De acuerdo con los expertos, estas armas son suficientes para equipar una unidad militar del Ejército, y se suman a las fuerzas armadas que los países de la OTAN ya tienen en Europa del Este. Según afirma el Estado Mayor ruso, su potencial de combate es de dos a tres veces mayor que el de las Fuerzas Armadas de Rusia. El Pentágono, por su parte, asegura que este es necesario para “contener la agresión rusa”. La falsedad de esta declaración, según ‘Nezavísimaya Gazeta’, es evidente si se tiene en cuenta que los tanques y vehículos de combate son armas ofensivas.
Fuente: RT.