El emblemático mural del puente Manuel José Othón, que celebra la cultura potosina, ha sido nuevamente blanco de vandalismo, esta vez en un aparente acto de retaliación por exclusión en el proyecto artístico.
Hace unas semanas, este mural, que honra los íconos culturales de la capital potosina, fue víctima de pintadas incomprensibles, obra de un grafitero molesto por no ser incluido en el proyecto, financiado por el Ayuntamiento capitalino.
La acción vandálica ha dejado consternados a los artistas locales y a la comunidad en general, que valoran esta obra como un símbolo de identidad y orgullo potosino. La intervención original, fruto del trabajo de varios expertos, fue desfigurada por trazos desordenados y sin sentido, como resultado del descontento de un grafitero excluido del proyecto.
El individuo responsable, identificado posteriormente, justificó su acto como una respuesta a lo que considera una exclusión injusta. Regresó al lugar este fin de semana para realizar nuevas pintadas, acusando a quienes lo identificaron y expusieron en redes sociales de cobardía y persecución.
Las autoridades municipales, tras un seguimiento mediante cámaras de vigilancia, lograron detectar al responsable del daño al mural. Aún no se ha anunciado si enfrentará alguna sanción por los daños ocasionados.
Este lamentable episodio pone de manifiesto la necesidad de promover la inclusión y el diálogo dentro de la comunidad artística local, así como de implementar medidas efectivas para proteger el patrimonio cultural de la ciudad contra actos vandálicos.
El Ayuntamiento capitalino ha emprendido un programa para la creación de murales en espacios públicos, pero es crucial garantizar que este proceso sea inclusivo y respetuoso con todos los artistas locales, evitando así situaciones como la ocurrida con el mural del puente Manuel José Othón.
