ESTADO DE MÉXICO.- José Ángel culpó al conductor de un taxi de aplicación para desviar las investigaciones del feminicidio de su esposa, la enfermera Adriana Inés Vidal, a quien él mismo habría asfixiado y subido a un auto para tirarla en una carretera.
En sus primeras declaraciones, José Ángel aseguró que la última vez que vio a su esposa había sido la tarde del 23 de julio cuando abordó un auto de alquiler por aplicación, del cual dijo desconocer sus características, para ir a una reunión.
Sin embargo, las indagatorias de la Fiscalía mexiquense (FGJEM) han revelado que aquel sábado la pareja tuvo una discusión cuando se encontraban en su vivienda en la Colonia Avándaro y José Ángel la habría estrangulado.
Luego subió el cuerpo de la víctima a un vehículo y lo trasladó hasta un camino de terracería en el municipio de Ozumba, cerca de la Autopista México- Cuautla, donde lo abandonó.
Un día después fue realizado el hallazgo del cuerpo, “el cual se encontraba en calidad de desconocido”, informó la Fiscalía en un comunicado.
Para desviar las investigaciones, José Ángel reportó la desaparición de la víctima cuatro días después, pero las inconsistencias en sus declaraciones llevaron a las autoridades a detenerlo y cumplimentarle un orden aprehensión, por lo que fue ingresado al Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Chalco.
José Ángel y Adriana Inés llevaban 11 años de matrimonio, lapso en el cual procrearon a dos niñas que quedaron en orfandad tras el feminicidio.
De 30 años de edad, Adriana trabajaba como enfermera en el Hospital Star Médica, en la Colonia Roma Norte de la Ciudad de México mientras que José Ángel, de 34, es nutriólogo.
“Ellos se conocieron en el servicio social en una clínica de la Ciudad de México, pero él era muy celoso, siempre le revisaba el celular y forcejeaban, apenas en febrero la tomó a la fuerza por el cuello”, narró un conocido de la familia.
En esa ocasión Adriana no quiso denunciar la agresión para evitar que sus hijas se desilusionaran de su padre.
El cuerpo de Adriana fue localizado el domingo pasado sobre la carretera Ozumba-Cuijingo, presentaba huellas de asfixia y estaba semidesnuda, como para simular una violación.
En redes sociales, sus familiares compartieron fotografías de José Ángel para exigir a las autoridades justicia por el feminicidio y que no el caso no quede impune.
Adriana fue velada en el municipio de Ixtlahuaca, lugar donde los familiares decidieron sepultarla.
El Gráfico