El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, describió el ataque del lunes en la línea de meta del maratón de Boston como “un acto de terrorismo” y reconoció que todavía se ignora quién o quiénes fueron los autores.
El mandatario ofreció ayer un segundo mensaje a los estadunidenses tras la explosión de dos bombas en Boston que dejaron tres personas muertas y 176 heridas, 17 de ellas de gravedad.
“Cada vez que se usan bombas contra civiles inocentes se trata de un acto de terrorismo”, dijo Obama en rueda de prensa en la Casa Blanca. “Este fue un acto atroz y cobarde”, agregó el Presidente, que tiene previsto ir mañana a Boston para un acto religioso en memoria de las víctimas.
“Aún no sabemos quién realizó este atentado ni por qué, si fue planificado y ejecutado por una organización terrorista, extranjera o estadunidense, o si fue un acto de un individuo”, agregó el Presidente.
Por su parte, el responsable del FBI en Boston, Rick DesLauriers, prometió ayer que “iremos hasta el último rincón de la Tierra para identificar al responsable o a los responsables de este crimen despreciable”.
Para el FBI la lista de “sospechosos y posibles motivaciones es amplia” dijo DesLauriers, señalando que ninguna organización ha reivindicado el atentado.
La policía registró un departamento en el noreste de Boston perteneciente a un estudiante saudita de 20 años que estuvo presente en el lugar de las explosiones y fue hospitalizado por graves quemaduras. La embajada saudita dijo que se trata de un “testigo, no de un sospechoso”.
“No tenemos a ninguna persona detenida”, manifestó por su parte en una conferencia de prensa el jefe de policía de Boston, Ed Davis.
Eran dos bombas artesanales
En tanto, el gobernador de Massachusetts, Deval Patrick, aclaró que “sólo dos bombas fueron encontradas”.
El agente especial del Departamento de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego de Estados Unidos, Gene Marquez, también desmintió reportes que indicaban que se habían encontrado hasta siete explosivos en Boston, y aseguró que las únicas bombas fueron las dos que detonaron.
Expertos en contraterrorismo dijeron que las bombas usadas en Boston fueron fabricadas usando ollas de presión como superestructura, pólvora como el explosivo y esferas de rodamiento como metralla adicional.
Afirmaron que las instrucciones sobre cómo fabricar estos dispositivos están disponibles en internet, y según fuentes cercanas a las investigaciones, las ollas fueron colocadas en mochilas y detonadas a distancia.
Cirujanos de emergencias en hospitales de Boston dijeron que la mayoría de los heridos sufrían heridas en las partes inferiores del cuerpo, y que a varios de ellos se les removió restos de metralla en cirugías, incluyendo esferas metálicas y clavos.
Mientras tanto, el país elevó su nivel de alerta. En el Aeropuerto Internacional Logan de Boston, dos pasajeros y sus equipajes fueron removidos de un vuelo de United Airlines.
Un avión de US Airways que llegó desde Filadelfia fue llevado al extremo del aeropuerto para analizar una maleta sospechosa.
En Nueva York, el aeropuerto La Guardia fue desalojado por un paquete sospechoso.
Atentados no rompieron el espíritu de los corredores
El silencio y la tristeza invadieron las calles de Boston tras los atentados en el marco del Maratón. A pesar de la pesadumbre, los corredores salieron a trotar, algunos con la bandera de Estados Unidos, y con la certeza de que seguirán en el movimiento atlético más allá de los temores.
“Hoy (martes) sí hay gente saliendo a las calles, está tranquilo; pero nada que ver con la celebración del maratón en otros años, hasta los que corrieron y traen su medalla andan silenciosos, a diferencia de otras veces que celebraban su llegada con las familias y amigos”, dijo a vía telefónica a Excélsior Germán Silva, ex maratonista y entrenador mexicano.
Silva y su familia no pudieron regresar ayer a México debido a complicaciones en los vuelos, por lo que tuvo tiempo para palpar Boston tras el atentado.
“Miedo para nada, al contrario. Veo tristeza de los corredores por lo que sucedió, por las personas que fallecieron y las heridas, veo molestia, tristeza, impotencia; pero veo que más gente tiene ganas de correr, tienen ganas de volver a Boston, no creo que mucha gente cambie sus planes de entrenar, competir y regresar a Boston. Al contrario, veo que la gente, a diferencia de otra situación, respondió muy solidaria”, compartió.
Una sensación similar reporta Sonia Chávez, editora de una revista de corredores y quien pudo platicar con varios de los 230 mexicanos que se inscribieron para participar en esa prueba.
“El espíritu del corredor va más allá de cualquier atentado como éste, en lugar de decir que ya no queremos correr sabemos que estamos preparados para sufrir, para el dolor, la alegría, toda una mezcla de sentimientos durante el maratón. Esto lo único que hace esta situación es engrandecer el espíritu de los corredores, nada externo nos va a detener”, afirma Chávez.
Boston intenta recuperarse, y en la zona de las explosiones se rinden honores. “En la llegada del maratón hay cámaras de televisión por todos lados, hay un área donde la gente pone flores, velas para los que fallecieron. Luego nos fuimos al río, hay clubes de corredores con la bandera de Estados Unidos como muestra de solidaridad”, relata Germán Silva.
Autores pueden ser estadunidenses
La posibilidad de que los responsables del atentado del lunes en Boston hayan sido terroristas domésticos parecía cada vez mayor, en base a una conjunción de fechas significativas y la casi irracional cólera contra el presidente Barack Obama.
Pero en ausencia de información sólida, las especulaciones van en caminos opuestos: ¿terrorismo doméstico? Tal vez. ¿Atentado externo? Quizás.
La mayor variante en las diversas tesis es la posibilidad de que el o los responsables puedan ser ciudadanos estadunidenses solitarios convertidos al islam, una de las mayores preocupaciones de los expertos antiterroristas.
Los grupos de derecha militante han florecido literalmente como reacción opuesta a la elección y gobierno de Barack Obama desde 2008, al tiempo que detalles del atentado, la forma en que se realizó en fechas simbólicas se conjunta esta semana para apoyar la idea de un atentado extremista
doméstico.
De acuerdo con el Southern Poverty Law Center (SPLC), un grupo especializado en temas de terrorismo y grupos de odio dentro de Estados Unidos, la llegada al poder del primer mandatario de color se reflejó en el crecimiento de grupos militantes “patriotas”.
En 2012, de acuerdo con su reporte más reciente, había mil 274 grupos e incluso 330 milicias armadas.
La semana comenzó el lunes con el Día de los Patriotas, para conmemorar dos batallas de la Guerra de Independencia; sigue con el llamado “día de los impuestos”, también el 15 de abril; continúa el jueves con el aniversario del atentado terrorista de Oklahoma en 1995, la matanza de Waco en 1993 y un incidente en 1985 con un grupo de “identidad cristiana”, así como el cumpleaños de Adolfo Hitler, el 20 de abril. En suma, un poderoso imán para la derecha.
Pero ése es también un argumento en contra. La mayoría de los ataques terroristas de origen interno ocurren en una fecha específica, no cerca de ella.
Otros alegan que ni las cosas ni las causas del atentado están claras, dado que nadie ha reivindicado el ataque y a final de cuentas, podría ser obra o bien de un grupo extremista de derecha o de “terroristas musulmanes” locales indoctrinados
y convencidos vía internet.
De hecho, de acuerdo con Mark Potok, un experto en terrorismo doméstico en Estados Unidos, no hay un blanco claro: un grupo local probablemente habría elegido un edificio federal o más exactamente, del Servicio de Impuestos.
“El blanco no era el gobierno, o el IRS, o un grupo minoritario –negros, homosexuales, musulmanes, inmigrantes, latinos, etc.– No fue dirigido contra ningún subgrupo específico”, indicó.
De acuerdo con Mark Pitcavage, director de Investigaciones de la Liga de Antidifamación, opinó también que el atentado “no se siente” como cometido por nativos.
“Ningún movimiento extremista doméstico, basado sólo en ideología, tendría una gran razón para atacar el Maratón de Boston… la prominencia del evento puede causar que cualquiera de una variedad de movimientos haga un ataque de esos.”
Pero Jessica Stern, una experta en terrorismo en la Universidad de Harvard, consignó a su vez que la semana como tal es el equivalente de “un largo y excitante día” para los derechistas.
La realidad es que existe también la teoría de que el responsable pudo haber sido un terrorista solitario, de origen estadunidense y autoconvencido de su causa radical islámica.
Un sonorense resultó herido
Allan Gustavo Rodríguez Flores es el único mexicano del que se tiene noticia que resultó herido tras las explosiones del lunes pasado en el Maratón de Boston.
El empresario de 36 años, nacido en Hermosillo pero radicado en Boston desde hace 13 años, resultó con la nariz fracturada y vivió siete minutos de angustia cuando al perder a su hijo y la madre de éste.
Rodríguez Flores dijo que por una serie de contratiempos no llegó al encuentro con su pequeño hijo de 2 años de edad y con la progenitora de éste, con quienes se encontraría muy cerca del lugar de la primera explosión.
“Mi hijo estaba con su mamá y los vería muy cerca del sitio donde estalló la primera bomba, pero como yo no llegué puntual se movieron; salí corriendo buscándolos, fueron segundos de diferencia entre una explosión y la otra.”
Desesperado, en la búsqueda se sumergió entre la gente que huía despavorida del lugar del siniestro. Luego, Rodríguez Flores cayó al suelo por la fuerza de la segunda explosión y se lastimó la nariz.
Luego de los bombazos, las autoridades estadunidenses restringieron la señal de telefonía celular para evitar que se pudieran detonar explosivos a distancia desde teléfonos móviles, medida que dificultó el encuentro de Allan Gustavo con sus seres queridos.
Pese a ello continuó hasta que, después de lo que consideró como los siete minutos más angustiantes de su vida, encontró al niño y a su
madre.
Ambos estaban ilesos pese a que estuvieron a escasos 30 metros de una de las explosiones.
“Fue horrible lo que viví, indescriptible, pero ya salí del hospital y sólo quedó en el susto, con otra oportunidad en la vida y mucho Allan para rato”, afirmó optimista el empresario, que tiene el restaurante El Centro y está por abrir uno más:
La Catrina.
De hecho, fue reconocido en 2012 con el premio Best of Boston por tener el mejor restaurante de comida mexicana en todo Boston y el área metropolitana.
El mexicano dijo que ama a su país y estado natal y se mantiene al tanto de lo que sucede en Hermosillo escuchando a través de internet a Las Noticias con Noé Curiel, de La Kaliente 90.70, estación filial de Imagen Radio en la capital de Sonora.
El Senado de México condena el atentado
El Senado de la República condenó ayer el atentado ocurrido en Boston, el cual calificó que “espantoso y artero ataque”, que provocó la muerte de al menos tres personas.
Justo al inicio de la sesión de ayer, el presidente de la Mesa Directiva, Ernesto Cordero, expresó que el Senado extiende sus más sentidas condolencias a las familias de las personas que fallecieron el lunes a consecuencia de dos explosiones registradas en esa ciudad norteamericana.
“Al expresar nuestra solidaridad con el pueblo de Estados Unidos y con la comunidad deportiva internacional también deseamos condenar este espantoso y artero ataque que afrenta una de las más libres actividades humanas como lo es atletismo”, dijo Ernesto Cordero.
El presidente del Senado añadió que los legisladores federales del país “manifestamos nuestro más sentido pésame a los familiares y amigos de los fallecidos en este trágico y lamentable acto y hacemos votos porque la nación norteamericana recupere a la brevedad el clima de paz y tranquilidad que requieren las sociedades progresistas”.
Efectos
1.- El gobierno de EU emprenderá acciones contra grupos radicales internos aún cuando no sean los responsables.
2.- Gobiernos de otros países reforzarán su seguridad por temor a atentados similares en su territorio.
http://www.excelsior.com.mx/global/2013/04/17/894202
