El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, autorizó este miércoles el desplazamiento de 450 soldados estadunidenses suplementarios en Irak para acelerar la formación de tropas iraquíes comprometidas en la lucha contra el grupo yihadista del Estado Islámico (EI).
Esta decisión tiene como meta “mejorar la capacidad y la eficacia de nuestros socios en el terreno”, indicó la Casa Blanca en un comunicado. Los soldados, como los 3 mil 100 que ya están en el terreno, no participarán en operaciones de combate.
Previo al anuncio, los periódicos estadunidenses The New York Times y The Wall Street Journal informaron que el gobierno de Obama tiene previsto enviar otros 500 soldados a Irak para combatir a la milicia islamita, que proclamó un califato en amplias zonas de Irak y Siria.
Los elementos, denominados asesores militares, ayudarán a expulsar a los extremistas de la provincia de Anbar, en el oeste del país árabe, señalan ambos medios con base en información de fuentes gubernamentales. Además, en la región se construirá una nueva base militar, por lo que el grupo llegarán en las próximas semanas para entrenar y equiparán a soldados iraquíes en la lucha contra EI.
El grupo yihadista tomó la capital provincial, Ramadi, por lo que los efectivos de apoyo se centrarán en su recuperación, añadieron al fuentes.