Una intensa ola de calor en Francia ha cobrado la vida de al menos 109 personas por ahogamiento entre junio y julio de 2025, lo que representa un preocupante aumento del 58 % en comparación con el mismo periodo del año pasado, informó la agencia Santé Publique France.
Las autoridades atribuyen este incremento al calor extremo que comenzó a mediados de junio y se ha mantenido durante julio, afectando también a otras partes de Europa. Especialistas advierten que las altas temperaturas impulsan a más personas a buscar alivio en ríos, lagos y playas, muchos de ellos sin supervisión, lo que incrementa el riesgo de incidentes.
El epidemiólogo Aymeric Ung explicó que el calor extremo agrava los riesgos al momento de nadar, sobre todo en zonas sin vigilancia. “El peligro de ahogamiento es muy real en cuerpos de agua no controlados”, advirtió en conferencia de prensa.
Particularmente alarmante es el número de menores fallecidos: 19 niños y adolescentes murieron ahogados en este periodo, el doble que en 2024. La mayoría de estos casos ocurrieron en ríos y lagos. En el caso de los adultos, los decesos se registraron principalmente en el mar.
Estos trágicos casos reflejan cómo el cambio climático y el aumento de temperaturas no solo provocan incomodidad, sino también consecuencias fatales, al agravar situaciones de riesgo en la vida diaria como el uso recreativo del agua.