El Radar
Por Jesús Aguilar
En el contexto político de San Luis Potosí, la ética y la legalidad en el actuar de los servidores públicos son fundamentales para mantener la confianza ciudadana y fortalecer la democracia. Desafortunadamente no sucede…
Las campañas negras arrecian y quieren demostrar con la fuerza de la ficción, la intimidación y la irrelevancia de pasquines digitales sin firma, pero con remitente claro que hay una sola narrativa, la de las fachadas o la sumisión.
Los pocos que arrecian con nombre y apellido son tristes bufones de un circo de 3 pistas en los que a casi todos ya los mordió el león… o al menos los cagó el burro Cleofas.
Recientemente, se ha observado una preocupación creciente respecto al uso de medios de comunicación por parte de entidades públicas para desacreditar a críticos y opositores, lo que plantea serias interrogantes sobre los límites legales y morales que deben observar los funcionarios públicos. Y además, en lo esencial, que se hacen con recursos públicos, a escondidas y de forma absolutamente irregular.
El papel de los diputados como contrapeso institucional
En este escenario, los diputados locales del MORENA Gabriela López Torres y del PAN Rubén Guajardo Barrera han tomado la responsabilidad de actuar como contrapesos efectivos dentro del Congreso del Estado. Guajardo Barrera, en particular, ha destacado por su desempeño legislativo, obteniendo el primer lugar en la evaluación de “Congreso Calificado”, una organización que analiza el trabajo de los legisladores en San Luis Potosí . Además, ha hecho llamados a respetar los procesos legales en la fiscalización de recursos, subrayando la importancia de evitar el uso político de las instituciones
Gabriela López, ha sido la única en cuestionar a profundidad medidas y puntos de acuerdo que mayoritea la borregada sin decir pío. Y eso hoy les cuesta…
Incluso la legisladora morenista López Torres, ya estudia el presentar una denuncia por violencia política en razón de género, luego de que en diversos “pseudo medios de comunicación” se infirieron comentarios que quisieron vincular sus decisiones legislativas con una relación extra legislativa con Barrera.
Hoy pues son también víctimas de un abierto desgaste orquestado desde alguna esfera de poder al que sin duda incomodan. Parece increíble que la ley del talión quiera aplicarse así.
El fenómeno del “sicariato digital” y el linchamiento en línea
El término “sicariato digital” se refiere a las acciones llevadas a cabo en las tecnologías de la información y comunicación, como las redes sociales, con la finalidad de dañar o tergiversar la imagen pública de las personas. Este fenómeno afecta la reputación y credibilidad de activistas, políticos y otros actores públicos, y ha evidenciado la ausencia de leyes que lo reconozcan como un delito tipificado .
Además, el “linchamiento digital” es un fenómeno relacionado, donde individuos o grupos utilizan las redes sociales para atacar colectivamente a una persona, a menudo sin considerar las consecuencias emocionales y psicológicas para la víctima .
Claudia Díaz Olavarrieta, miembro de El Colegio Nacional, ha señalado que el uso problemático de las redes sociales tiene consecuencias perjudiciales en la salud mental, incluyendo ansiedad y depresión . Asimismo, el investigador Mario Alberto Velázquez García del Colegio de Sonora ha advertido que las redes sociales se están convirtiendo en un problema de salud pública debido a situaciones como el estrés y la violencia digital .
En el ámbito político, el uso de redes sociales por parte de entidades públicas para denostar a críticos ha sido objeto de crítica. Por ejemplo, en España, se ha denunciado el uso partidista de las redes sociales oficiales del Ayuntamiento de Palencia por parte del PSOE, lo que ha generado preocupaciones sobre la falta de respeto a las instituciones y a la ciudadanía .
La falta de regulación específica sobre el uso de redes sociales para denostar a personajes públicos plantea desafíos legales. Si bien existen leyes que protegen el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar, y a la propia imagen, como la Ley Orgánica 1/1982 en España, estas pueden no ser suficientes para abordar los nuevos desafíos que presentan las redes sociales .
En México, se han propuesto iniciativas para reconocer el “sicariato digital” como un delito, como la ley contra la violencia digital en el estado de Puebla. Sin embargo, aún existe un vacío legal en muchos aspectos relacionados con el uso de redes sociales para denostar a personajes públicos .
El mal uso de las redes sociales para denostar a personajes públicos mediante la exposición de circunstancias personales es un fenómeno preocupante que requiere una atención urgente desde el ámbito legal y ético. Es fundamental establecer regulaciones claras que protejan los derechos fundamentales de las personas y promuevan un uso responsable de las redes sociales, especialmente por parte de entidades públicas y figuras políticas.
Además, es necesario fomentar una cultura de respeto y responsabilidad en el uso de las redes sociales, tanto por parte de los usuarios como de las instituciones, para evitar el daño a la reputación y la salud mental de las personas afectadas.
Nadie hace nada, hasta que le pasa… así que los otros 25 legisladores tendrían que empezar a poner sus barbas a remojar porque el sicariato digital está desatado… y hay tantos objetos del deseo público hoy que no vaya a ser que el ojo del gran hermano los termine poniendo en capilla.