Un padre escondió a su hijo en un basurero para protegerlo del fatal tiroteo en Highland Park, Illinois, durante este lunes.
Se trata de la masacre en que murieron seis personas y al menos 31 quedaron heridas, luego que un hombre abriera fuego en medio de un desfile por las celebraciones del 4 de julio en Estados Unidos.
Alexander Sandoval (39) era uno de los asistentes al desfile. Al lugar llegó con su hijo de seis años, su pareja, su hija de cinco años y su perro.
En el lugar pusieron unas sillas para tener buena vista. Sin embargo, todo quedó interrumpido al registrarse los disparos.
“Pensé que era la Marina saludando a la bandera”, reconoció en diálogo con The New York Times. Sin embargo, más tarde se percató de la peligrosa situación.
“Agarré a mi hijo y corrimos e intentamos romper el escaparate de una tienda para escapar”, manifestó, afirmando que también intentó derribar una puerta en un negocio cerrado, para luego seguir corriendo, pero “no pude atravesarla”.
“Creo que el tirador se detuvo y recargó”, relató Alexander Sandoval, quien aprovechó ese instante para esconder a su hijo y al perro dentro de un basurero.
Junto con ello, le pidió a alguien que los cuidara, puesto que debía volver a buscar a sus otros familiares. “Cuando volví corriendo a buscarlos, vi personas baleadas en el suelo”, contó.
Más tarde supo que su pareja y su hija estaban a salvo en un McDonald’s cercano. Por suerte, pudieron sobrevivir al brutal ataque por el cual fue detenido un hombre de 22 años.
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